El calvario de la ruta San José-San Ramón lleva más de 11 años. Inicia en el 2002, se adjudica en el 2004, se firma el inicio de las obras en mayo del 2005. En junio del 2006 se da la primera prórroga, y en setiembre de ese mismo año, se da una prórroga indefinida sobre el contrato que dura cinco años y nueve meses.
¿A quién se le puede ocurrir que la Ley General de Administración Pública y Ley de Contratación Administrativa permiten prórrogas indefinidas?, ¿cómo todos esos funcionarios del Consejo Nacional de Concesiones, no aplicaron las sanciones y anularon el contrato?
Hay un contencioso administrativo que perfectamente se puede esperar, antes de ir a un arbitraje, ya que primero hay que tener un contrato legal, verdaderamente fundamentado, y no buscar un acuerdo con un contrato leonino e ilegal.
El Ministerio Público está investigando si las personas que firmaban el contrato tenían capacidad jurídica para hacerlo y la señora Presidenta inicio la negociación con ellos el pasado martes 17 de setiembre.
No puedo dejar de recordar las palabras de Stephan Brunner, exgerente del Proyecto de la carretera San José – Caldera, sobre la concesionaria Autopistas del Sol, “ese es el modelo de negocios de la empresa y así lo han hecho en España, ellos escogen carreteras que son políticamente importantes para los gobernantes y luego atrasan el inicio y con eso presionan en el precio y por lo general los políticos ceden porque quieren que el proyecto termine antes de que acabe su administración, ese un modelo de negocio que fue muy exitoso en España y aquí con la carretera a Caldera”
Patricia Perez Hegg.
Miércoles, 02 Octubre 2013 05:23
¿Qué va a terminar primero: el arbitraje o el contencioso administrativo?
Comentarista Invitado
El 22 de abril, la señora Presidente nos dijo por cadena nacional de televisión que había llegado a un acuerdo trasparente con la empresa OAS, conveniente para el país. Por lo que creí que la Presidente Chinchilla había entendido que ese era un contrato leonino, abusivo e ilegal.