El maltrato a los niños y niñas es un problema social grave, con raíces culturales y efectos psicológicos, que pueden producirse en las familias de cualquier nivel económico y educativo.
Son graves las consecuencias que muestran los niños maltratados: presentan un comportamiento problemático y manifiestan diferentes actitudes como agresividad verbal y física, dicen mentiras, muestran ausentismo, tienen moretes y miedos, se enferman constantemente, sufren daño a nivel de desarrollo cerebral, retraso cognitivo, problemas psicológicos que se manifiestan en conductas de alto riesgo, depresión, ansiedad, lo que los hace más propensos a consumo de alcohol, drogas, riesgos de conducta antisocial, así como problemas de relaciones afectivas.
Se ha comprobado que el abuso y la negligencia con menores, causan que regiones importantes del cerebro no crezcan ni se desarrollen normalmente, esto ocasiona problemas de desarrollo de capacidades cognitivas de lenguaje y académicas.
Los padres y madres justifican su agresividadacusando a los niños por estar sucios, no comer, por pegar a otroso sencillamente dicen que lo hacen porque tienen problemas personales, les duele la cabeza o simplemente sus hijos no responden al estereotipo de niño IDEAL. .Otro factor importante es la incapacidad para comprender y criar al niño.Creen que los niños son de su propiedady que tienen derecho absolutosobre ellos.
Es lamentable, porque además de todo el dolor físico y emocional que soportan, LOSNIÑOS que son víctimas de agresión crecen pensando que la gente que lastima es parte de la vida cotidiana, el comportamiento se torna aceptable, y el ciclo del abuso y agresión continua también, muy probablemente ellos harán lo mismo con sus hijos e hijas.
Por eso, no se quede con los brazos cruzados, si usted escucha en una casa gritos o insultos a un pequeño, o lo ve sucio, en estado de abandono, triste, que llora mucho, que se lamenta;denuncie, no tenga miedo, puede hacerlo en forma anónima al 911, pero hágalo.Y si no está seguro, solo tiene sospechas, denúncielo así: como un supuesto caso, es mejor que la policía y las autoridades del PANI lo descarten tras investigar, antes que por sus dudas, un ser inocente siga sufriendo.
No les recomiendo ni sugiero, les suplico, manténganse vigilantes. Debemos actuar ante cualquier sospecha, los más pequeñosdependen hasta de la persona desconocida para librarse de una triste realidad.En cuanto a los más grandecitos, también debemos denunciar y aquí son las maestras y los profesores quienes juegan un papel fundamental.
Rocío Solís
Presidenta Comisión Costarricense de Cooperación con la UNESCO