Miércoles, 12 Agosto 2015 05:49

La ética pública es monopolio de todos

La corrupción se encuentra latente en todos los ámbitos de la sociedad costarricense, no distingue género, clase social, cultural, posición o bandera política. Lamentablemente, en lugar de enfrentarla y buscar soluciones, algunos partidospolíticos y personas, convirtieron el tema en un arma de política electoralpara alcanzar el poder, sin saber que esa etiqueta les iba a explotar en la frente, inexorablemente, como le sucedió a los revolucionarios franceses que terminaron en la misma guillotina que sus víctimas.

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La corrupción no es asunto de políticos, es un asunto de humanos, no puede ser monopolio de ningún partido político.Es un fenómeno social que existe en toda sociedad humana y que debe ser enfrentado como tal.
En los últimosdías, siguiendo lo que se ha convertido en una cultura contra la corrupción, se han señalado actos queson censurados y prohibidos en el código de ética del Frente Amplio, aunque su principal líder,José María Villalta, dice que no ve nada irregular en la elusión fiscal que involucra a sus compañeros de causa.
La ética tampoco es potestad de una persona o partido político. Así como en todo grupo humano hay corrupción, en toda organización social, hay personas que honran a la Patria y por eso, no se vale las generalizaciones.
Como lo ha denunciado, don OttónSolís, en su partido se han presentado casos serios que riñen con la ética del PAC, y ahora se presentan en el Frente Amplio y eso no es de extrañar.Ojalá les sirvan estos ejemplos a los adalides de la moral pública para tener más cuidado con lo que se dice o se hace.
Es imperativo que partidos como el FA y el PAC aprendan a abordar la corrupción como una problemática social, y no como su caballito de batalla en cada campaña electoral, y entonces así podríamos empezar a buscar medidas para iniciar el cambio de la cultura del abuso, la deshonestidad, la estafa y todas esas prácticas que empañan nuestro sentido de ser costarricense.
En el Partido Liberación Nacional, entendimos el mensaje popular, aprendimos de los errores y estamos haciendo esfuerzos para enfrentar este flagelo, pero como no es monopolio de nadie, solo se lograrán acciones positivas y firmes si nos unimos todos, sin demagogia y sin etiquetas, porque todos estamos sufriendo el problema.

JULIO ROJAS ASTORGA
DIPUTADO.