Según los últimos datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Censos, en Costa Rica existen 228 mil personas sin trabajo. Solo entre los meses de julio a setiembre del año pasado, 26 mil costarricenses recibieron la mala noticia de que estaban despedidos.
En lo que llevamos de este 2015 hemos visto con preocupación los constantes anuncios de cierres de empresas y recortes de personal.
Es por eso que desde la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado, UCCAEP, solicitamos a las autoridades que actuemos con celeridad para atender el creciente desempleo que está golpeando a las miles de familias del país.
Esta ola de despidos es señal de que algo no está bien, de que algo debemos mejorar, y esos aspectos incluyen una alta claridad sobre los temas que afectan las decisiones de inversión y sobre todo, mucha convicción. El desempleo es un flagelo que debemos combatir todos.
Para UCCAEP existen dos tipos de factores que generan desempleo. El primero es de orden estructural que e incluye las elevadas tarifas eléctricas que subieron dos veces más que la inflación durante 2014, así como la infraestructura deficiente y los excesos regulatorios, a veces contradictorios.
En segunda instancia están los aspectos relacionados con la confianza. Temas como el aumento del déficit fiscal, la aprobación de un Presupuesto Nacional sin recorte de gastos, la inseguridad jurídica generada por el levantamiento del veto a la Reforma Procesal Laboral y la pérdida de dinamismo económico; han minado la confianza del sector productivo.
UCCAEP es consciente de que el aumento del desempleo no solo afectan a las familias de los trabajadores, sino también a instituciones como la Caja Costarricense de Seguro Social.
Revertir la tendencia creciente de desempleo no será sencillo, pero es posible.
Necesitamos señales que estimulen la confianza y con ella el crecimiento económico, la seguridad jurídica, menos burocracia, incentivar la formalidad y por supuesto, el compromiso de nuestras autoridades.
Como generadores del 85% del empleo del país y motor de la economía nacional, reiteramos nuestra disposición de trabajar en conjunto con nuestras autoridades para buscar y ejecutar las medidas que pongan freno al aumento en el desempleo. Costa Rica es un país maravilloso y todavía estamos a tiempo.
Ronald Jiménez Lara
