Y mi mamá, junto a sus hermanos, vivió en la casa del Padre Alfaro, en Desamparados, para ir al colegio, pues no había secundaria en Cervantes, el pueblo donde crecieron. Desde que yo era un niño, la radio se relacionó con la voz de dos curas, el Padre Álvaro Coto, en San Isidro de El General, donde crecí, y el Padre Armando Alfaro de este comentario. Cuando yo tenía 16 años, el Padre Alfaro recibió mis comentarios, de insipiente periodismo, en Eco Católico, periódico que dirigió por muchos años y que transformó y modernizó. Poco después, me ayudó en mis primeros pasos por el periodismo televisivo, y fue la persona que me abrió las puertas en la Cámara Nacional de Radio, hace exactamente veinte años. Después, pasé una Semana Santa con él, en Santa Ana, haciendo un recorrido por su vida y su obra. Esa vez, fui con él a las procesiones de Escazú y conversamos despacio sobre su vida. Me conmovió su gran trabajo. El producto es un libro que publiqué varios años más tarde, y que usted puede bajar libremente en la página www.solidarismoenaccion.com.
Creció al alero de su hermano, Paco, quien fue como su padre. Se hizo cura en una generación brillante, junto a Román Arrieta Villalobos, quien después fue arzobispo; Héctor Morera, obispo emérito de Tilarán, y el Padre Evans, quien fue un baluarte en el desarrollo de Siquirres. Su primera tarea como cura fue darle trato digno a los niños lustrabotas de Heredia, los niños pobres y sin educación de su ciudad. Después se involucró con la educación técnica. Fue enviado a especializarse en Estados Unidos. Estudió Periodismo y Educación Técnica. Fundó un colegio técnico en Desamparados. Retomó el Eco Católico y lo convirtió en un medio moderno. Fundó Radio Fides, la primera emisora católica del país. Fides significa fe. Y años después, apadrinó el nacimiento de TeleFides. Por su cercanía con el periodismo, fue presidente del Colegio de Periodistas y fundó una urbanización exclusivamente para comunicadores, en Montes de Oca. Como lo suyo es esa suma de educación y comunicación, fue un gran aliado de la formación de grupos de Boys Scouths en el país y en la Cámara Nacional de Radio (CANARA) fue desde presidente hasta uno de los fundadores del programa Panorama, programa en el que apareció un comentario suyo una vez por semana durante muchos años. Pero fue, sobre todo, un cura. Cuando don Rigoberto Urbina Pinto una vez enfermó, le llevó la comunión a su lecho de enfermo. Cuando don Rigoberto comulgó, la hostia cayó de su boca al suelo. El Padre Alfaro tomó la hostia del suelo y la puso en su propia boca. Eso siempre ha impactado a don Rigoberto. A mí también me conmueve. A sus 90 años, acaba de fallecer este cura, periodista y educador costarricense. Que Dios tenga en su seno a este hombre tan noble y tan bueno, con un gran ejemplo de vida.
Martes, 14 Enero 2014 07:35
El legado del Padre Armando Alfaro Paniagua…
Escrito por Camilo Rodríguez Chaverri
El Padre Armando Alfaro Paniagua fue una figura mítica de mi niñez. Crió a un puñado de sobrinas suyas que son primas hermanas de mi mamá. Esas muchachas han sido como sus hijas.