Me fascina la luz de Orosi. Si uno camina por el pueblo, puede escuchar una gran cantidad de jilgueros. También está en Orosi una de las iglesias más antiguas y hermosas de Costa Rica, con un museo y un cementerio antiquísimo a los lados. Es un pueblo con plaza. Ojalá que nunca la conviertan en un parque. Que hagan un parque, sí, pero en otra parte. Quien va a Orosi, no debe perderse el templo más antiguo de Costa Rica, el de Ujarrás, primera casa de una patrona del país, la Virgen de la Inmaculada Concepción de El Rescate de Ujarrás. Lo otro que está en ese valle es la entrada al Parque Nacional Tapantí, un sitio hermosísimo, lleno de diversidad y color. Orosi es un lugar para escuchar aves. Orosi es el cielo atrapado por un río. De Orosi es uno de los emprendedores más especiales que conozco. Se llama Marvin pero toda la gente lo conoce como Media Libra. Le debe su apodo a su padre, un campesino que trabajaba en una finca y se dedicaba a sacar queso, que vendían en bolsas de media libra.  El joven Marvin Media Libra tuvo que empezar a trabajar desde niño. No pudo terminar ni la escuela. Bueno, parece que le dieron el título de primaria porque vieron su esfuerzo, según me contó su maestra. Después, fue jardinero de la iglesia de los hermanos franciscanos, ayudante del padre, sacristán, reparador de bicicletas, cobrador de bus y más adelante mensajero y policía. Pudo salir adelante como empresario por su pasión por el trabajo  y por la maquinaria. Se acuesta muy temprano y hasta al pie del cañón antes de las cuatro de la madrugada. Tiene una importante empresa con decenas de máquinas pesadas, un bellísimo hotel en Orosi, que se llama “Tapantí Media”, y otro en camino, que es una idea loca y espléndida, para que los turistas conozcan de la vida en el campo. Él, que pudo dejar de ser mensajero y cobrador de bus para convertirse en un gran empresario, ve con dolor e impotencia la inutilidad del Estado, que todo lo hace al paso de la tortuga y a veces al paso del cangrejo, es decir, para atrás. Por ejemplo, ha luchado para que le instalen un semáforo para proteger a las personas con discapacidad en un pueblo vecino, y no lo ha conseguido. Nos unimos al clamor de este gran empresario, un ejemplo de superación digno de estudio, hijo honorable de este valle esplendoroso que es Orosi. Necesitamos muchos como Marvin Media Libra para desarrollar a Costa Rica. Camilo Rodríguez Chaverri