Comentarista Invitado
De cara a nuestra campaña institucional 2012, las palabras con las que queremos dirigirnos al pueblo costarricense son más que percepciones o ideas de unos pocos, nos dirigimos a Costa Rica en nombre de miles de voluntarios/as que día a día luchamos por construir una Latinoamérica sin pobreza, voluntarios/as que se han comprometido con la realidad de su país y tienen la convicción de que trabajando codo a codo con las personas que viven en condiciones de pobreza, tomando consciencia sobre las causas estructurales que producen la pobreza y las actitudes que contribuyen a mantenerla, podemos actuar para generar soluciones y cambios reales, canalizando nuestro voluntariado como un mecanismo de verdadera participación ciudadana.
Hace 6 años llegó a Costa Rica Un Techo para mi País, gracias al trabajo en conjunto con las comunidades más empobrecidas del país, el sector privado y las diversas instituciones públicas y organizaciones con que hemos articulado; es que logramos transformaciones en la calidad de vida de las personas y el fortalecimiento de la organización comunitaria.
Hoy, después de 15 años de aprendizaje y crecimiento, somos TECHO, y nos enorgullece presentar a la sociedad costarricense el cambio institucional que hemos vivido y la renovación de nuestro compromiso y convicción por la superación de la pobreza.
Hoy nuestra campaña dice que “no hay fuerza más grande que la voluntad de toda la sociedad” y hace referencia a lo que hacemos como institución; trabajamos por superar la pobreza uniendo voluntades: la voluntad de las comunidades, la voluntad de los/as voluntarios/as y en esencia, la voluntad de todos y cada uno de los sectores de la sociedad, porque sabemos que si sumamos la voluntad de todos, podemos lograr un verdadero cambio social.
De esta forma, nuestra campaña pretende lograr una reflexión en la sociedad en dos sentidos;
1. Qué es la pobreza, cuáles son sus causas y qué tenemos que hacer para superarla.
Hemos aprehendido que la pobreza involucra una problemática con muchas dimensiones que van más allá de la económica, se manifiesta también en la vulneración de derechos fundamentales y de la dignidad humana, en la incapacidad de satisfacer las necesidades básicas, en la limitación de la libertad, en la falta de oportunidades y en la exclusión dentro de los espacios de participación y decisión en la vida civil, social, cultural y política. La pobreza es una problemática prioritaria que exige soluciones en relación a todos los ámbitos señalados y el involucramiento de toda la sociedad para superarla.
2. Qué es la voluntad, cómo la ejercemos y qué es capaz de lograr?
El cambio de imagen que mostramos hoy, es reflejo de un cambio institucional, estructurado en tres ejes; modelo de intervención, gestión social de proyectos y estructura organizacional. Por esto, TECHO persigue tres objetivos estratégicos: (1) El fomento del desarrollo comunitario en asentamientos precarios, a través de un proceso de fortalecimiento de la comunidad, que desarrolle liderazgos validados y representativos, y que impulse la organización y participación de miles de pobladores de asentamientos precarios para la generación de soluciones a sus problemáticas. Por eso el desarrollo comunitario es considerado como eje transversal de la intervención de TECHO en asentamientos precarios (2) La promoción de la conciencia y acción social, con especial énfasis en la masificación del voluntariado trabajando en terreno con los pobladores de las comunidades en condición de pobreza e involucrando a distintos actores de la sociedad , impulsando el voluntariado como mecanismo de participación ciudadana y promoviendo la reflexión crítica y propositiva frente a la problemática de la pobreza (3) La incidencia en política, que promueva los cambios estructurales necesarios para que la pobreza no se siga reproduciendo y disminuya rápidamente.
Hoy, esta campaña busca comunicar justamente el resultado de este proceso de cambio y transmitir lo que hacemos como institución, es un llamado a que nos unamos como sociedad, pues estamos conscientes de que la pobreza debe ser un problema prioritario a resolver y que como TECHO estamos convencidos que si sumamos la voluntad de todos y todas, podemos superarla.
El 27 y 28 de Julio, 5000 voluntarios van a salir a buscar $250 mil dólares, lo invitamos a sumar su voluntad donando Un Rojo por Un TECHO.
De cara a nuestra campaña institucional 2012, las palabras con las que queremos dirigirnos al pueblo costarricense son más que percepciones o ideas de unos pocos, nos dirigimos a Costa Rica en nombre de miles de voluntarios/as que día a día luchamos por construir una Latinoamérica sin pobreza, voluntarios/as que se han comprometido con la realidad de su país y tienen la convicción de que trabajando codo a codo con las personas que viven en condiciones de pobreza, tomando consciencia sobre las causas estructurales que producen la pobreza y las actitudes que contribuyen a mantenerla, podemos actuar para generar soluciones y cambios reales, canalizando nuestro voluntariado como un mecanismo de verdadera participación ciudadana.
Etiquetado como
¿Cómo imaginaron hace 188 años que iba a ser Guanacaste los ciudadanos del Partido de Nicoya que reunidos un 25 de julio de 1824 decidieron de forma libre anexarse a Costa Rica?
La historia nos cuenta que hubo razones políticas y económicas que influyeron para que el Partido de Nicoya quisiera formar parte de Costa Rica. El ambiente pacífico del país pesó en la decisión.
El aporte de la provincia al país es innegable y por ello Guanacaste merece figurar en la agenda nacional en un lugar protagónico y no en un recuerdo esporádico u ocurrente de talla electoral.
Hoy más que nunca tenemos la imperativa tarea de preguntarnos: ¿Cómo se sueña Guanacaste? ¿Cómo la queremos los guanacastecos?
Más allá de las protestas que se convocan en distintos puntos de la provincia ante un creciente descontento popular por la falta de inversión pública y el olvido recurrente de gobierno a gobierno, los guanacastecos estamos llamados a tomar el rumbo de nuestro destino, uno capaz de cohesionar socialmente, de impulsar un crecimiento inclusivo y sostenible.
Pareciera irónico que nuestras tierras llenas de riqueza natural, potencial turístico y legado cultural, no ocupen en el proyecto país un sitio de liderazgo. Causa extrañeza que los cambios en el modelo productivo agropecuario y la gran apuesta hacia una economía donde el turismo y los servicios atrajeron grandes inversiones, no se hayan traducido en mejores condiciones de vida para la población guanacasteca originaria.
Los ejemplos de liderazgo en la provincia son muchos, las oportunidades que podemos construir nos imponen grandes retos, entre ellos: el de lograr que el crecimiento que viene experimentando la provincia sea sinónimo también de verdadero desarrollo que propicie: el emprendedurismo, los empleos de calidad, el acceso a los servicios, la protección ambiental y que permita superar, de una vez por todas, el rezago que nos coloca como una de la regiones de mayor: pobreza, desempleo y carencia en infraestructura y tecnología.
En este aniversario de la Anexión, como cooperativistas conscientes del valor del trabajo y la cooperación, levantamos la bandera de la esperanza y convocamos a los guanacastecos a manifestarnos contra la inacción, el conformismo y el olvido.
COOPEGUANACASTE, R.L. como organización cooperativa netamente guanacasteca, cree firmemente que sí se puede construir desarrollo con justicia y equidad pues sabe que las soluciones no van a llegar de promesas políticas añejas o de recetas cortoplacistas.
La participación ciudadana en todos los ámbitos hoy no es una elección, es una demanda de una Guanacaste que se sueña próspera y justa.
Aquí tenemos una tierra pujante que cada mañana debemos sembrar con nuestras propias manos. No hay fórmulas mágicas para el desarrollo, no hay antídotos contra la pobreza más que nuestro trabajo, nuestro compromiso por defender lo que nos ha costado.
Volvemos a la pregunta: ¿cómo soñaron a Guanacaste hace 188 años? y nuestra respuesta debe ser un homenaje a quienes soñaron engrandecer el país.
Un Guanacaste que sea parte indispensable de una gran nación, donde el trabajo de todos permita alcanzar la felicidad: máxima aspiración humana.
Volvamos a nuestras raíces, encontremos en nuestra forma de ser los mejores valores para construir ese Guanacaste que se levantó firme y que de forma voluntaria alzó la voz para decir que somos de la patria y por ello: la formamos, la queremos, la defendemos.
Marisol Arias Murillo
Periodista de COOPEGUANACASTE, R.L.
¿Cómo imaginaron hace 188 años que iba a ser Guanacaste los ciudadanos del Partido de Nicoya que reunidos un 25 de julio de 1824 decidieron de forma libre anexarse a Costa Rica?
Etiquetado como
¿Cómo imaginaron hace 188 años que iba a ser Guanacaste los ciudadanos del Partido de Nicoya que reunidos un 25 de julio de 1824 decidieron de forma libre anexarse a Costa Rica?
La historia nos cuenta que hubo razones políticas y económicas que influyeron para que el Partido de Nicoya quisiera formar parte de Costa Rica. El ambiente pacífico del país pesó en la decisión.
El aporte de la provincia al país es innegable y por ello Guanacaste merece figurar en la agenda nacional en un lugar protagónico y no en un recuerdo esporádico u ocurrente de talla electoral.
Hoy más que nunca tenemos la imperativa tarea de preguntarnos: ¿Cómo se sueña Guanacaste? ¿Cómo la queremos los guanacastecos?
Más allá de las protestas que se convocan en distintos puntos de la provincia ante un creciente descontento popular por la falta de inversión pública y el olvido recurrente de gobierno a gobierno, los guanacastecos estamos llamados a tomar el rumbo de nuestro destino, uno capaz de cohesionar socialmente, de impulsar un crecimiento inclusivo y sostenible.
Pareciera irónico que nuestras tierras llenas de riqueza natural, potencial turístico y legado cultural, no ocupen en el proyecto país un sitio de liderazgo. Causa extrañeza que los cambios en el modelo productivo agropecuario y la gran apuesta hacia una economía donde el turismo y los servicios atrajeron grandes inversiones, no se hayan traducido en mejores condiciones de vida para la población guanacasteca originaria.
Los ejemplos de liderazgo en la provincia son muchos, las oportunidades que podemos construir nos imponen grandes retos, entre ellos: el de lograr que el crecimiento que viene experimentando la provincia sea sinónimo también de verdadero desarrollo que propicie: el emprendedurismo, los empleos de calidad, el acceso a los servicios, la protección ambiental y que permita superar, de una vez por todas, el rezago que nos coloca como una de la regiones de mayor: pobreza, desempleo y carencia en infraestructura y tecnología.
En este aniversario de la Anexión, como cooperativistas conscientes del valor del trabajo y la cooperación, levantamos la bandera de la esperanza y convocamos a los guanacastecos a manifestarnos contra la inacción, el conformismo y el olvido.
COOPEGUANACASTE, R.L. como organización cooperativa netamente guanacasteca, cree firmemente que sí se puede construir desarrollo con justicia y equidad pues sabe que las soluciones no van a llegar de promesas políticas añejas o de recetas cortoplacistas.
La participación ciudadana en todos los ámbitos hoy no es una elección, es una demanda de una Guanacaste que se sueña próspera y justa.
Aquí tenemos una tierra pujante que cada mañana debemos sembrar con nuestras propias manos. No hay fórmulas mágicas para el desarrollo, no hay antídotos contra la pobreza más que nuestro trabajo, nuestro compromiso por defender lo que nos ha costado.
Volvemos a la pregunta: ¿cómo soñaron a Guanacaste hace 188 años? y nuestra respuesta debe ser un homenaje a quienes soñaron engrandecer el país.
Un Guanacaste que sea parte indispensable de una gran nación, donde el trabajo de todos permita alcanzar la felicidad: máxima aspiración humana.
Volvamos a nuestras raíces, encontremos en nuestra forma de ser los mejores valores para construir ese Guanacaste que se levantó firme y que de forma voluntaria alzó la voz para decir que somos de la patria y por ello: la formamos, la queremos, la defendemos.
Marisol Arias Murillo
Periodista de COOPEGUANACASTE, R.L.
¿Cómo imaginaron hace 188 años que iba a ser Guanacaste los ciudadanos del Partido de Nicoya que reunidos un 25 de julio de 1824 decidieron de forma libre anexarse a Costa Rica?
Etiquetado como
MARVIN MORA BRENES
Etiquetado como
MARVIN MORA BRENES
Etiquetado como
Desde hace varios meses habíamos llamado la atención sobre el proyecto de canalización del río San Juan por parte del Gobierno de Nicaragua, y sus potenciales riesgos ecológicos en la zona norte.
Obviamente que la construcción de un canal por el río San Juan causará impactos ambientales, de los cuales Costa Rica, se verá afectada. Recordemos que la construcción implicaría el remover de mucho material del río, dragados, y utilización de maquinaria y equipo pesado. Eventualmente habría construcciones de represas en ciertos sectores, que podría hacer llegar el nivel de las aguas hasta territorios que hoy son costarricenses, lo que podría traer problemas de soberanía y efectos legales internacionales.
Por tal razón, nuestro gobierno debe solicitar al de Nicaragua que se le informe de los alcances de canalización del río. Pero más que eso, si llegara a ser factible la canalización hay que exigir la realización de estudios de impacto ambiental. Por otro lado, recomendamos a nuestro gobierno ir recopilando toda la información pertinente sobre la región norte y sobre cuencas multinacionales. Sobre el caso de la Cuenca del San Juan, hay un importante estudio realizado por la SIECA, en donde se analizan factores ambientales, climáticos, de precipitación, y los efectos de obras de represamiento del río.
Costa Rica debe hacer valer sus derechos sobre el río San Juan. Pero aporte de esto, convencer a los nicaragüenses de que el valor del río depende en mucho del potencial hídrico de los ríos tributarios, que están en Costa Rica. Es decir, un proyecto de canalización no se puede planear sin tomar en cuenta a nuestro país, con sus recursos acuáticos, pues el río San Juan es una Cuenca, con recursos naturales compartidos.
La canalización del río San Juan debería llevar implícito el desarrollo de un programa de conservación de cuencas, en especial de la protección de los bosques de la cuenca. Es más, se debería pensar en la creación de un Parque Nacional internacional que protegiera la Cuenca Binacional del río San Juan.
Costa Rica ha establecido áreas silvestres fronterizas, como la de Caño Negro y Barra del Colorado. Sin embargo Nicaragua no ha cumplido con sus compromisos ambientales asumidos en la Reunión Mundial de la UICN realizada en Costa Rica en febrero de 1988.
Costa Rica debe respaldar y adoptar las directrices y principios para controlar, prevenir, reducir o eliminar los daños ambientales a recursos naturales compartidos que ha planteado el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). En esta coyuntura, la adopción de estas directrices es prioridad.
La posición de Costa Rica debe ser firme, y si es del caso, aparte de grupos de expertos de la Región, debe solicitarse apoyo y respaldo técnico a organismos como las Naciones Unidas, para que se analice los efectos ambientales de un proyecto de canalización de una Cuenta Internacional con recursos naturales compartidos.
Alexander Bonilla Durán
Desde hace varios meses habíamos llamado la atención sobre el proyecto de canalización del río San Juan por parte del Gobierno de Nicaragua, y sus potenciales riesgos ecológicos en la zona norte.
Etiquetado como
Desde hace varios meses habíamos llamado la atención sobre el proyecto de canalización del río San Juan por parte del Gobierno de Nicaragua, y sus potenciales riesgos ecológicos en la zona norte.
Obviamente que la construcción de un canal por el río San Juan causará impactos ambientales, de los cuales Costa Rica, se verá afectada. Recordemos que la construcción implicaría el remover de mucho material del río, dragados, y utilización de maquinaria y equipo pesado. Eventualmente habría construcciones de represas en ciertos sectores, que podría hacer llegar el nivel de las aguas hasta territorios que hoy son costarricenses, lo que podría traer problemas de soberanía y efectos legales internacionales.
Por tal razón, nuestro gobierno debe solicitar al de Nicaragua que se le informe de los alcances de canalización del río. Pero más que eso, si llegara a ser factible la canalización hay que exigir la realización de estudios de impacto ambiental. Por otro lado, recomendamos a nuestro gobierno ir recopilando toda la información pertinente sobre la región norte y sobre cuencas multinacionales. Sobre el caso de la Cuenca del San Juan, hay un importante estudio realizado por la SIECA, en donde se analizan factores ambientales, climáticos, de precipitación, y los efectos de obras de represamiento del río.
Costa Rica debe hacer valer sus derechos sobre el río San Juan. Pero aporte de esto, convencer a los nicaragüenses de que el valor del río depende en mucho del potencial hídrico de los ríos tributarios, que están en Costa Rica. Es decir, un proyecto de canalización no se puede planear sin tomar en cuenta a nuestro país, con sus recursos acuáticos, pues el río San Juan es una Cuenca, con recursos naturales compartidos.
La canalización del río San Juan debería llevar implícito el desarrollo de un programa de conservación de cuencas, en especial de la protección de los bosques de la cuenca. Es más, se debería pensar en la creación de un Parque Nacional internacional que protegiera la Cuenca Binacional del río San Juan.
Costa Rica ha establecido áreas silvestres fronterizas, como la de Caño Negro y Barra del Colorado. Sin embargo Nicaragua no ha cumplido con sus compromisos ambientales asumidos en la Reunión Mundial de la UICN realizada en Costa Rica en febrero de 1988.
Costa Rica debe respaldar y adoptar las directrices y principios para controlar, prevenir, reducir o eliminar los daños ambientales a recursos naturales compartidos que ha planteado el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). En esta coyuntura, la adopción de estas directrices es prioridad.
La posición de Costa Rica debe ser firme, y si es del caso, aparte de grupos de expertos de la Región, debe solicitarse apoyo y respaldo técnico a organismos como las Naciones Unidas, para que se analice los efectos ambientales de un proyecto de canalización de una Cuenta Internacional con recursos naturales compartidos.
Alexander Bonilla Durán
Desde hace varios meses habíamos llamado la atención sobre el proyecto de canalización del río San Juan por parte del Gobierno de Nicaragua, y sus potenciales riesgos ecológicos en la zona norte.
Etiquetado como