Aquí hemos invertido las cosas, para cada problema inventamos una ley, que posiblemente ya existe pero que no se aplica, ante un hecho o supuesto factico en la realidad social hay que aumentar las penas, establecer más prohibiciones, complicar más los procesos administrativos y judiciales, alargar plazos y al final del día, por las mismas contradicciones volvemos al punto cero.
Nuestro Derecho lamentablemente es casuístico, lamás de las veces nuestra fábrica de leyesactúaal impulso de una situación críticamomentánea, normalmente motivada en la improvisación y la ocurrencia.
Hemos penalizado la justicia y judicializado casi todas las áreas del actuar humano,específicamente en el derecho público y administrativo, lo hemos hecho cada día más prohibitivo, más lento , con mas requisitos, en consecuencia cada vez somos menos competitivos ante un mundo globalizado que nos exige eficiencia, efectividad y calidad en todos los servicios y productos que intercambiamos.
Entre leyes, decretos, reglamentos, actos administrativos, circulares, directrices, etc.etc. existen más de 23.000 normas jurídicas que muchas de ellas son repetitivas, obsoletas, innecesarias y contradictorias.
Eso hay que reversarlo o nos terminara devorando esta jungla jurídica que aprisiona el aparato estatal y muchas veces ataca simultáneamente al sector privado. La formula es simplificar, derogar, modernizar si queremos salir de este túnel que nos tiene atrapados, mientras que todos los países de la región ya despegaron, nos quedamos impávidos observando el crecimiento de los otros, mientras seguimos discutiendo, por donde va el desfile.
Hagamos, trabajemos, actuemos, pero sobre todo, revisemos nuestro ordenamiento jurídico público,de lo contrario pereceremos.
LIC. EFREN ARAUZ C