Quienes tuvimos la endeble ilusión de que estábamos frente a una nueva forma de entender la política, por parte de los partidos representados en la Asamblea Legislativa, a raíz de la conformación de la llamada Alianza por Costa Rica, con gran tristeza y mayor preocupación, debemos reconocer que, al menos, uno de sus integrantes, el PAC, tiene dueño, al juzgar por lo que hemos visto en los últimos días.
Ese dueño como tal, sus actuaciones lo evidencian, actúa por sí y ante sí, por encima de lo que piense su directorio político, sus diputadas y diputados. Hasta ignora los compromisos adquiridos con las otras agrupaciones políticas, que hicieron posible lo impensable, que un diputado del PAC, fuera en el actual Presidente Legislativo.
La acción del señor Otón Solís deja manifiesto, que a él no lo desvela las obligaciones de mediano y largo plazo, contraídas, con las otras agrupaciones integrantes de la Alianza, de por sí ya el PAC obtuvo lo único a lo podía aspirar en esta Asamblea Legislativa, la Presidencia pues la próxima según lo acordado, le correspondería al Movimiento Libertario, ahora sin duda, en la cola de un venado. Estas acciones nos evidencian que el PAC si tiene dueño pues son muy similares a otras que hemos visto, en el pasado, en agrupaciones políticas que sin duda también tuvieron y tienen dueño.
Voy a hacer mis propias conclusiones que pretenden explicar esa acción del señor Otón Solís, primero que nada, busca provocar una ruptura con y de la Alianza, para no tener que cumplir con el resto de los compromisos adquiridos, no solo por la fracción del PAC y hasta del mismo Directorio Político de ese partido, el cual le dio luz verde a su bancada para que se integrara a la Alianza por Costa Rica.
Segundo, marcar la cancha al dejar claro, que si bien él no tiene puesto formal alguno dentro del PAC, sigue siendo quien decide el rumbo de esa agrupación, lo cual quedó más que claro, cuando a pesar de las quejas de algunos diputados sobre las acciones emprendidas por el señor Solís, al final, todas y todos aceptaron sus directrices.
Tercero, la experiencia legislativa y política de don Otón, le deberían decir que ese supuesto apoyo a la nueva intentona fiscal del gobierno, está condenada a muerte pues tal como, lo anunció la señora Vicepresidente de la Asamblea Legislativa Patricia Pérez Hegg, ya están preparando carretilladas de mociones al proyecto, como lo hizo, en el pasado, el Movimiento Libertario, que al final, impidieron la aprobación de los últimos paquetes impulsados de las administraciones Figueres, Rodríguez y Pacheco.
Y la cuarta y última, tiene la muy equivocada idea, en mi concepto, de que esta jugadita, le aportará réditos electorales, a punto tal, que un grupo de ciudadanos, le pidan reconsiderar su decisión, de no participar más en la lucha electoral pues él es el único que podría salvar a la Patria de la crisis actual, en la que ciertamente está.
Todo eso puede sonar muy bien, excepto por una cosa y es que, la inmensa mayoría del pueblo, ya está harta de esas triquiñuelas burdas de los políticos tradicionales, que solo han redundado en el beneficio del manda más de los partidos y el de sus allegados. El pueblo ya exige otra forma de actuar en política, porque entiende que si se repiten procedimientos, no se deben esperar resultados nada diferentes.
Quienes tuvimos la endeble ilusión de que estábamos frente a una nueva forma de entender la política, por parte de los partidos representados en la Asamblea Legislativa, a raíz de la conformación de la llamada Alianza por Costa Rica, con gran tristeza y mayor preocupación, debemos reconocer que, al menos, uno de sus integrantes, el PAC, tiene dueño, al juzgar por lo que hemos visto en los últimos días.
Ese dueño como tal, sus actuaciones lo evidencian, actúa por sí y ante sí, por encima de lo que piense su directorio político, sus diputadas y diputados. Hasta ignora los compromisos adquiridos con las otras agrupaciones políticas, que hicieron posible lo impensable, que un diputado del PAC, fuera en el actual Presidente Legislativo.
La acción del señor Otón Solís deja manifiesto, que a él no lo desvela las obligaciones de mediano y largo plazo, contraídas, con las otras agrupaciones integrantes de la Alianza, de por sí ya el PAC obtuvo lo único a lo podía aspirar en esta Asamblea Legislativa, la Presidencia pues la próxima según lo acordado, le correspondería al Movimiento Libertario, ahora sin duda, en la cola de un venado. Estas acciones nos evidencian que el PAC si tiene dueño pues son muy similares a otras que hemos visto, en el pasado, en agrupaciones políticas que sin duda también tuvieron y tienen dueño.
Voy a hacer mis propias conclusiones que pretenden explicar esa acción del señor Otón Solís, primero que nada, busca provocar una ruptura con y de la Alianza, para no tener que cumplir con el resto de los compromisos adquiridos, no solo por la fracción del PAC y hasta del mismo Directorio Político de ese partido, el cual le dio luz verde a su bancada para que se integrara a la Alianza por Costa Rica.
Segundo, marcar la cancha al dejar claro, que si bien él no tiene puesto formal alguno dentro del PAC, sigue siendo quien decide el rumbo de esa agrupación, lo cual quedó más que claro, cuando a pesar de las quejas de algunos diputados sobre las acciones emprendidas por el señor Solís, al final, todas y todos aceptaron sus directrices.
Tercero, la experiencia legislativa y política de don Otón, le deberían decir que ese supuesto apoyo a la nueva intentona fiscal del gobierno, está condenada a muerte pues tal como, lo anunció la señora Vicepresidente de la Asamblea Legislativa Patricia Pérez Hegg, ya están preparando carretilladas de mociones al proyecto, como lo hizo, en el pasado, el Movimiento Libertario, que al final, impidieron la aprobación de los últimos paquetes impulsados de las administraciones Figueres, Rodríguez y Pacheco.
Y la cuarta y última, tiene la muy equivocada idea, en mi concepto, de que esta jugadita, le aportará réditos electorales, a punto tal, que un grupo de ciudadanos, le pidan reconsiderar su decisión, de no participar más en la lucha electoral pues él es el único que podría salvar a la Patria de la crisis actual, en la que ciertamente está.
Todo eso puede sonar muy bien, excepto por una cosa y es que, la inmensa mayoría del pueblo, ya está harta de esas triquiñuelas burdas de los políticos tradicionales, que solo han redundado en el beneficio del manda más de los partidos y el de sus allegados. El pueblo ya exige otra forma de actuar en política, porque entiende que si se repiten procedimientos, no se deben esperar resultados nada diferentes.