Miércoles, 29 Junio 2016 05:54

Infraestructura para el desarrollo

El bienestar de un pueblo deviene del acceso que tienen sus habitantes a servicios e infraestructura que les permitan vivir con dignidad.

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Durante décadas, Costa Rica ha acusado un crónico rezago en su infraestructura educativa pública. El resultado es la odiosa división entre los estudiantes de los colegios privados y los de los colegios públicos.
El rendimiento y las oportunidades de los muchachos y muchachas en aulas de colegios públicos cayó estrepitosamente frente al de sus pares en colegios particulares.
Mejorar los programas educativos, fortalecer los conocimientos de los profesores y modernizar la infraestructura de colegios y escuelas son tres de las vías elegidas para revertir esa situación.
Para soltar amarras y construir la infraestructura que ubicará a nuestros jóvenes y niños en condiciones de primer mundo, el MEP, el BID y el Banco Nacional apostaron a la figura del fideicomiso.
El mecanismo es celosa y rigurosamente tamizado por los controles de la ley de Contratación Administrativa. Pero requiere una eficiente administración de los recursos por parte del fiduciario para funcionar.
El esfuerzo del MEP y Banco Nacional dio su primer fruto al entregar, la semana anterior, las modernas instalaciones del colegio de Mata de Plátano de Guadalupe.
Los muchachos y muchachas de Mata de Plátano, ya no tendrán que recibir clases aulas improvisadas bajo un sol inclemente o bajo la lluvia escurriéndose a sus pies.
Aspiramos que muchos más todavía puedan recibir lecciones en condiciones óptimas. Para ser un país desarrollado, debemos apostar en grande a mecanismos ágiles, efectivos y transparentes.
El fideicomiso MEP-Banco Nacional permitirá construir 59 secundarias académicas y colegios técnicos y 24 canchas techadas.
La queja incesante de nuestra población es que la obra tarda en llegar y mal haríamos en postergarla, porque al hacerlo, castigaríamos a una generación completa a la postración y a la pobreza que resulta de la falta de la educación.
¡Que vengan más fideicomisos, que se levanten más aulas, que se construyan más escuelas! Al hacerlo garantizamos el progreso y bienestar de nuestro país.