Hace unos días nos llamó una señora preocupada por la contaminación de Plomo en una empresita cerca de su casa.
Tiene razón de estar preocupada, porque efectivamente el Plomo es uno de los peligros ocupacionales más antiguos y extendido. El Plomo una vez dentro del organismo puede permanecer ahí por años destruyendo gradualmente a la víctima hasta envenenarla completamente. El Plomo lo puede adquirir en la calle por el Plomo que contenía la gasolina. Investigaciones realizadas en diferentes países, se ha podido demostrar que entre el 65 y 90 % del plomo incorporado al organismo humano de los habitantes urbanos, proviene de la combustión de los vehículos. Dichosamente en Costa Rica se ha eliminado el Plomo en la Gasolina.
Otros expuestos son los que trabajan en pequeños talleres de baterías. En el INS debe haber muchos expedientes de personas afectadas por Plomo. El video lo pueden comprar en el Consejo Interamericano de Seguridad en Estados Unidos. Tenemos la dirección para los interesados.
Cuando el plomo afecta a las mujeres embarazadas o a los niños, esto puede significar un menor coeficiente intelectual, una reducción en la capacidad de aprendizaje, un menor desarrollo de la memoria, alteraciones sensoriales especialmente la visión, trastornos de la conducta.
Investigaciones realizadas en Estados Unidos permitió apreciar diferencias entre niños que tenían altas concentraciones de plomo en la sangre del cordón umbilical al nacer, y niños con bajas concentraciones. Hubo diferencias en el desarrollo mental.
A todo esto hay que agregar que los efectos del plomo sobre la salud de los niños es más grave cuando hay problemas de dieta. Es decir, los niños de los países pobres son más propensos a verse afectados debido a las altas tasas de desnutrición infantil existente en muchos de nuestros países. Y precisamente aquí es donde se le pone todavía el tetraetilo de plomo a la gasolina.
En los adultos se presenta una relación entre las concentraciones de plomo y un aumento de la presión arterial, antecedente frecuente de las enfermedades cardíacas. También se ha comprobado una asociación entre la exposición a bajas concentraciones de plomo con la alteración en la formación de los glóbulos rojos, los trastornos renales y en la función del sistema nervioso.
Si alguien se siente afectado por alguna empresa que manipule Plomo, puede denunciarlo ante el Ministerio de Salud o la Defensoría de los Habitantes. Pero los más indicados a valorar la situación en el lugar, son los mismos trabajadores de la empresa, quienes si no tienen el cuidado y el equipo adecuado, pueden estar intoxicándose, poco a poco, con Plomo y afectar los pulmones, el cerebro, el sistema nervioso, la sangre. También puede estar causándoles cansancio, dolores de cabeza, pérdida de apetito, debilidad o dolores de estómago.
Alexander Bonilla Durán
Hace unos días nos llamó una señora preocupada por la contaminación de Plomo en una empresita cerca de su casa.
Tiene razón de estar preocupada, porque efectivamente el Plomo es uno de los peligros ocupacionales más antiguos y extendido. El Plomo una vez dentro del organismo puede permanecer ahí por años destruyendo gradualmente a la víctima hasta envenenarla completamente. El Plomo lo puede adquirir en la calle por el Plomo que contenía la gasolina. Investigaciones realizadas en diferentes países, se ha podido demostrar que entre el 65 y 90 % del plomo incorporado al organismo humano de los habitantes urbanos, proviene de la combustión de los vehículos. Dichosamente en Costa Rica se ha eliminado el Plomo en la Gasolina.
Otros expuestos son los que trabajan en pequeños talleres de baterías. En el INS debe haber muchos expedientes de personas afectadas por Plomo. El video lo pueden comprar en el Consejo Interamericano de Seguridad en Estados Unidos. Tenemos la dirección para los interesados.
Cuando el plomo afecta a las mujeres embarazadas o a los niños, esto puede significar un menor coeficiente intelectual, una reducción en la capacidad de aprendizaje, un menor desarrollo de la memoria, alteraciones sensoriales especialmente la visión, trastornos de la conducta.
Investigaciones realizadas en Estados Unidos permitió apreciar diferencias entre niños que tenían altas concentraciones de plomo en la sangre del cordón umbilical al nacer, y niños con bajas concentraciones. Hubo diferencias en el desarrollo mental.
A todo esto hay que agregar que los efectos del plomo sobre la salud de los niños es más grave cuando hay problemas de dieta. Es decir, los niños de los países pobres son más propensos a verse afectados debido a las altas tasas de desnutrición infantil existente en muchos de nuestros países. Y precisamente aquí es donde se le pone todavía el tetraetilo de plomo a la gasolina.
En los adultos se presenta una relación entre las concentraciones de plomo y un aumento de la presión arterial, antecedente frecuente de las enfermedades cardíacas. También se ha comprobado una asociación entre la exposición a bajas concentraciones de plomo con la alteración en la formación de los glóbulos rojos, los trastornos renales y en la función del sistema nervioso.
Si alguien se siente afectado por alguna empresa que manipule Plomo, puede denunciarlo ante el Ministerio de Salud o la Defensoría de los Habitantes. Pero los más indicados a valorar la situación en el lugar, son los mismos trabajadores de la empresa, quienes si no tienen el cuidado y el equipo adecuado, pueden estar intoxicándose, poco a poco, con Plomo y afectar los pulmones, el cerebro, el sistema nervioso, la sangre. También puede estar causándoles cansancio, dolores de cabeza, pérdida de apetito, debilidad o dolores de estómago.
Alexander Bonilla Durán
