Jueves, 09 Septiembre 2010 07:32

DIA DEL NIÑO

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Hace pocas semanas Tracy Barrantes, de 16 años, estudiante  del Liceo de San Roque de Grecia, participó como cientos de adolescentes  del primer Encuentro Nacional de Artes Plásticas, Educación Musical y Cívica impulsado por el Ministerio de Educación Pública MEP, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia UNICEF y otras agencias del Sistema de Naciones Unidas.

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Tracy expresó que “El arte nos libera de las drogas y la violencia”. Dijo que el arte esa es una forma bonita de expresarse en los colegios y las escuelas. Ella junto a seis compañeros  utilizó moldes de acetato y  “sprays” para estampar en una gran manta la palabra inglesa “love” que en español significa “amor”.

El día del Nino y la Niña, que por la legislación vigente es toda persona menor de 18 años, debe celebrarse de la mano de la educación de calidad.

Una educación de calidad además de las mejoras en el currículo  y  las condiciones laborales de los docentes, significa lograr que cada escuela y colegio ponga a quien recibe la educación como el centro de todo su esfuerzo. En palabras más sencillas, una educación de calidad exige que cada escuela y cada colegio   amen a los niños, niñas y adolescentes. Hablamos aquí de quienes asisten regularmente y también de quienes han sido expulsados del sistema y deberían ser acogidos de nuevo.
También es clave pensar desde ahora en quienes aún no tienen la edad escolar pero viven ya su primera infancia. Para ellos y ellas hay que construir una red de cuido y desarrollo infantil que les sirva de puente para un buen comienzo en sus vidas ya que los primeros tres años son fundamentales para el desarrollo de toda persona.  Es necesario capacitar a padres,  madres de familia y cuidadores para que brinden estos servicios de calidad incorporando  a la niñez migrante, indígena y afrodescendiente.  


Toda persona menor de edad debe tener garantizada hoy una educación que le asegure mañana un empleo estable, la posibilidad de generar una idea creativa para montar una empresa propia, o bien una actividad rentable que sostenga una obra solidaria con un enfoque social. 
 
Una educación de calidad es la mejor herramienta para romper el ciclo de pobreza que en Costa Rica incluye a uno de cada cinco habitantes.

Cuando hablamos de una educación de calidad pensamos también en una escuela o un colegio que incorpore a los padres y madres de familia en el proceso formativo de sus hijos. Pensamos también en la incorporación de quienes trabajan sin salario en las comunidades   desde las organizaciones no lucrativas, pero también a quienes lo hacen desde los municipios y las empresas privadas. Es fundamental trabajar  colectivamente en la protección con el fin de asegurar comunidades seguras para la infancia y la adolescencia.


UNICEF impulsa el modelo de Escuelas Amigas de la Infancia para aumentar progresivamente las normas de calidad   abordando todos los elementos que influyen en el bienestar y los derechos del niño y la niña. Las normas de calidad deben facilitar que todos los estudiantes tengan acceso a la escuela, pasen de un curso a otro y terminen el ciclo a tiempo y ojalá, lo hagan muy felices. También deben ofrecer una rica experiencia educativa por medio de la cual   puedan progresar, desarrollarse y lograr su pleno potencial.


Una educación de calidad para el niño, la niña y la persona adolescente de Costa Rica significa una escuela y un colegio que les de participación no solo en los concursos de oratoria  sino también en la toma de decisiones sobre las actividades extra curriculares como el arte, la música, la plástica, tal como la está haciendo Tracy Barrantes en el Liceo de San Roque de Grecia. Solo así, hoy Día del Niño,  podremos responder al reto que nos lanza esta adolescente a través del mensaje de su manta de tela en el que destaca la palabra amor.

Seija Toro, Representante de UNICEF


 

Y2K

Representante de la empresa Y2K Webs.