Los años fueron pasando y las bombas contra incendios dejaron de ser remolcadas por caballos, las mangueras fueron de materiales más resistentes y ya no solo teníamos cascos, sino también capa y botas.
Nuestra historia siguió su curso, Costa Rica creció y con ella su Cuerpo de Bomberos.
Las emergencias aumentaron y se diversificaron. La peligrosidad de los riesgos incrementó y por ende, el equipo y los trajes de los bomberos se han transformado para proveer la protección necesaria a quienes los portan.
Pero hay algo que nunca cambió, algo que se mantiene como una constante desde el bombero que fundó la organización, hasta el que hoy atenderá su primera emergencia.
Lo que se ha mantenido intacto por 145 años es lo que hay dentro del traje del bombero.
Dentro de ese traje hay una persona con defectos y virtudes, que sin importar su condición social, género o edad, tiene un don especial que, ante una situación de emergencia, la lleva a correr en dirección opuesta a la mayoría de la población.
Lo que hay dentro de un traje de bombero es una persona con VOCACIÓN.
VOCACIÓN que impulsa a sacrificar horas con la familia, descanso o diversión para ir a atender emergencias.
VOCACIÓN que da energía para mantenerse en pie por muchas horas en condiciones de frío, calor o tensión extrema.
VOCACIÓN que brinda motivación para estudiar y entrenar, para hacer cada día el trabajo de mejor forma.
A las más de 1400 personas con vocación, quienes eligieron servir a Costa Rica a través del Cuerpo de Bomberos como bomberos asalariados, voluntarios o administrativos… Feliz 145 Aniversario.
Que esta conmemoración nos recuerde el compromiso eterno que tenemos los bomberos, ante nuestra comunidad, de servir con oportunidad y calidad.
Y a los centenares de personas que se están preguntando si pueden canalizar su vocación de servicio dentro de un traje de bombero… les invitamos a incorporarse, siempre y cuando estén dispuestos a dar lo mejor de sí con ABNEGACIÓN, HONOR Y DISCIPLINA.
ESTE FUE UN COMENTARIO DE: Héctor Chaves León, Director de Bomberos