Los promotores esconden cuidadosamente los elementos que han generado que a través de los años haya aumentado la matrícula y portación de armas de la ciudadanía.

Por ejemplo callan que el armamento de la ciudadanía se debe a la legislación complaciente con los criminales, el acceso de extranjeros indeseables y con el libre tránsito que hoy gozan los criminales y sicarios extranjeros en nuestro país.

Es esa gente que sin oficio conocido, poniendo como pretexto una unión  marital con un o una costarricense, en realidad se dedican a delinquir, traficar drogas y asesinar en nuestro país.

Por eso es que ha proliferado la seguridad privada como negocio y la necesidad de los ciudadanos de tener yo portar un arma para su seguridad, la de su familia y de su patrimonio.

Me preocupa que toda esta legislación restrictiva que se nos quiere imponer, solamente afectará a los ciudadanos honestos y que respetamos la ley, los mismos que hoy vivimos enrejados en nuestras propias casas; no así para los  criminales que utilizan las armas para sus fechorías, las cuales adquieren del mercado negro y viven en completa libertad, impunidad e irrespeto total a la ley.

Mejor sería enfocar los esfuerzos legislativos en una reforma que castigue a los criminales con todo el peso de la ley y dejarse de alcahuetería con las personas que abusen de las armas, las tengan o las porten sin permisos, pero principalmente a quienes las utilicen para cometer actos criminales.

Las medidas sugeridas en esta reforma nos dejan en una clara condición de total desventaja e indefensión a los ciudadanos y comerciantes honestos ante la delincuencia armada, arrebatándonos nuestro derecho a la legítima defensa.

El verdadero fin de este proyecto es entrabar más el trámite de registro legal de las armas para quienes cumplimos con la ley o debemos contar con un oficial de seguridad en nuestras empresas.

Eso es muy preocupante para nuestra propia seguridad, ya que en vez de controlar las armas existentes en el país, se aumentará el mercado negro de armas, el cual saldrá ganando con estas medidas.

De las medidas propuestas en la presente reforma, se deduce claramente que los afectados serán todos los ciudadanos que cuentan con sus armas legalmente inscritas; no así los delincuentes y criminales, que poseen y usan armas sin inscripción y que cometen con ellas los peores crímenes.

Por estas razones, considero que las medidas contenidas el presente proyecto son nocivas, lesionan y restringen nuestros derechos fundamentales a la Legítima Defensa y a la Propiedad de las personas honestas; sin molestar para nada a quienes utilizan las armas para cometer delitos con ellas.

Muy cordialmente,

Lic. David Jiménez Ramírez

Ciudadano y Empresario

Cédula N° 1-1012-718