Miércoles, 14 Octubre 2015 11:23

Uso del idioma: redundancias

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Bienvenidos a una nueva sección En defensa del español a cargo del filólogo y escritor Carlos Díaz Chavarría. Hoy abordaremos el tema de las redundancias.
Escuchemos lo que nos dice don Carlos al respecto.

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“La redundancia es el uso de palabras inútiles porque su significado ya está implicado en el de otra palabra; es decir, se estaría diciendo dos veces lo mismo. Las personas argumentan que usan las redundancias para darle énfasis a la idea expuesta, pero eso es una justificación pobre pues es ilógico utilizar palabras que poseen el mismo significado. Por ejemplo es innecesario decir: “resumir brevemente” ya que la palabra “resumir” implica que es llevar un asunto a términos breves.
Otras redundancias muy comunes en el español son: “lapso de tiempo”, “ver con los ojos”, “volver a reiterar” o “vivir la vida”.
También es importante recordar que existen dos tipos de redundancias: las de forma y las de contenido.
Las redundancias de forma son aquellas donde lo que redunda son solo unas pocas palabras, por ejemplo, “en el mes de marzo” o “constelación de estrellas”.
En este sentido, explica nuestro filólogo que una redundancia de forma muy común es: “totalmente gratis”. Esta frase cae en un exceso pues entre decir “un refresco completamente gratis” y “un refresco gratis” no existe diferencia técnica, por lo tanto no cabe aplicar palabras de más como en el primer caso.
En cuanto a las redundancias de contenido, son aquellas donde redunda toda la idea expresada, por ejemplo: “Diga lo que opina, de esa manera expondrá su punto de vista”, cuando perfectamente solo se pudo decir: “Opine”.
Como dato curioso, las redundancias: “subir arriba”, “bajar abajo”, “entrar para adentro” o “salir para afuera” fueron aceptadas por la Real Academia de la Lengua Española por su uso, eso implica que se pueden utilizar en un contexto informal, pero nunca en uno formal.
Señala el experto que un buen ejercicio para evitar redundancias propias es detectarlas en otros. ¡Así que a ponerlo en práctica! Muchas gracias a don Carlos por traernos este interesante tema.