Hoy don Carlos hará referencia al uso de las contracciones en español.
Las contracciones son una figura de dicción que permite formar una sola palabra integrada por otras dos, de las cuales una termina y la otra empieza en vocal, eliminando la primera vocal de la segunda palabra.
Uno de los ejemplos más habituales en nuestra lengua, es la contracción “al” que está compuesta por la preposición “a” más el artículo “el”, y la otra contracción común en español es el término “del”, compuesto por la preposición “de” más el artículo “el”.
De ahí que, lo correcto es decir, por ejemplo, Retiraron la carga del camión, en lugar de: retiraron la carga de el camión, si se coloca separado, está incorrecto.
También estará correcto decir: Los bomberos ingresaron al edificio en llamas, pero si se escribe o se dice separado: los bomberos ingresaron a el edificio en llamas, se estaría cometiendo un vicio del lenguaje.
Ahora bien, debe tenerse en cuenta que si el artículo forma parte de un nombre propio, no se puede realizar la contracción. Por eso lo correcto es decir: Ella es de El Salvador, separado, pues decir: Ella es del Salvador, es incorrecto.
Tampoco puede aplicarse la contracción cuando, en lugar del artículo “el”, se está en presencia del pronombre “él”, por ejemplo: De él hay que aprender muchísimo, además se debe recordar que al ser pronombre, ese “él”, lleva tilde.
También, en el lenguaje coloquial es muy frecuente la contracción de la palabra “para”. Ejemplo: ¿pa’ qué lo querés?, en lugar de ¿para qué lo querés?, pero lógicamente esta contracción es inapropiada en el contexto formal.
Esto es todo por hoy. En próximas cápsulas continuaremos con más información y consejos para mejorar nuestra manera de comunicarnos, siempre de la mano de nuestro colaborador y filólogo Carlos Díaz Chavarría.
Les damos la bienvenida a una nueva cápsula sobre el rescate del idioma español, la cual está a cargo de nuestro comentarista, escritor y filólogo Carlos Díaz Chavarría.
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