Jessenia Calderón señaló que, en primer lugar, el AYA, tiene un inventario de necesidades, el cual se convierte en una especie de hoja de ruta para saber qué necesitamos en el país en materia de inversión en esta materia de agua potable y alcantarillado sanitario.
INSERCIÓN: se realizó un diagnóstico de necesidades y de inversión y de equipamiento, a partir de las cuales se planteó un portafolio de proyectos a corto y mediano plazo, portafolio que no es estático, que todos los días se alimenta, que todos los días se pule, que todos los días se actualiza.
Una vez elaborado este inventario, AYA se puso a buscar el dinero para realizar estas inversiones; por tal motivo, una de las medidas que se tomaron fue el incremento de tarifas que se realizó en marzo del año pasado.
INSERCIÓN: Con la solicitud de este incremento tarifario y una vez aprobado, entonces en conjunto con las autoridades de gobierno, ya podíamos iniciar el mejoramiento de la situación financiera institucional, como requisito para gestionar una serie de endeudamientos que es la única forma que nos permite la ARESEP, para poder avanzar con todas las inversiones importantes.
Según Jessenia Calderón, si las inversiones se financiaran solo con tarifas, los abonados tendríamos que pagar muchísimo más de lo que hoy cancelamos en nuestro recibo, por lo que se necesitaba era otra fuente de ingresos, en este caso, por medio de préstamos.
Cumplidas estas metas, la del inventario de necesidades y la de búsqueda de financiamiento, se procedió a la analizar la capacidad interna de la institución para realizar obras en todo el país, muchas de ellas de gran envergadura.
Mañana le contaremos sobre los proyectos que llevará a cabo AyA en los próximos años y el resultado que se espera, precisamente con esas obras.