En 1964, un estudiante de geología llamado Donald R. Currey llegó al Pico Wheeler, en la Gran Cuenca que cubre el estado de Nevada y partes del Estado de Utah y California.
Currey estaba ahí para estudiar la edad del hielo glaciar, lo cual hizo parcialmente recopilando datos de los anillos de los árboles. Empleando herramientas de perforación para retirar material del centro del árbol, identificó especimenes de más de 4.000 años de edad.
Cuando su herramienta de extracción de muestras se atascó en el interior de un enorme árbol, solicitó permiso al Servicio Forestal de los Estados Unidos para cortar el tronco a una altura de 2,4 metros sobre el suelo y dejar al aire un tajo horizontal para su estudio. El permiso le fue concedido.
Cuando hubo contado los anillos del tronco, descubrió que el árbol, conocido como Prometeo tenía más de 4.844 años de edad.
Más tarde, el investigador Don Graybill, obtuvo muestras más cercanas al suelo, y demostró que Prometeo tenía 4.862 años de edad, era el ser vivo más antiguo jamás descubierto en ese momento.
Lo malo fue que el corte que hizo el estudiante Currey terminó por acabar con la vida de Prometeo.
Así que quién sabe cuantas adversidades no enfrentó este árbol en casi 5 mil años de vida.
Pero no pudo soportar la taladora de Donald Currey.
En el año 2008 se descubrió el árbol más antiguo hasta ahora identificado, una pícea de 9.550 años que data de la era glacial,
El descubrimiento se dio en la provincia de Dalarna, en Suecia.
La parte visible del árbol, de cuatro metros de altura, tiene alrededor de unos 600 años, pero su sistema de raíces ha estado creciendo por unos 9.550 años.
El arbusto, que fue encontrado en una altitud de 910 metros, debe su increíble longevidad a la capacidad de clonarse a si mismo.
Los tallos y el tronco de la pícea tienen una vida útil de alrededor de 600 años; pero tan pronto éstos mueren surgen unos nuevos de las reservas de la raíz
¿Y dejarán al estudiante Donald Currey acercársele a este árbol?
Lo dudamos demasiado.
En 1964, un estudiante de geología llamado Donald R. Currey llegó al Pico Wheeler, en la Gran Cuenca que cubre el estado de Nevada y partes del Estado de Utah y California.
Currey estaba ahí para estudiar la edad del hielo glaciar, lo cual hizo parcialmente recopilando datos de los anillos de los árboles. Empleando herramientas de perforación para retirar material del centro del árbol, identificó especimenes de más de 4.000 años de edad.
Cuando su herramienta de extracción de muestras se atascó en el interior de un enorme árbol, solicitó permiso al Servicio Forestal de los Estados Unidos para cortar el tronco a una altura de 2,4 metros sobre el suelo y dejar al aire un tajo horizontal para su estudio. El permiso le fue concedido.
Cuando hubo contado los anillos del tronco, descubrió que el árbol, conocido como Prometeo tenía más de 4.844 años de edad.
Más tarde, el investigador Don Graybill, obtuvo muestras más cercanas al suelo, y demostró que Prometeo tenía 4.862 años de edad, era el ser vivo más antiguo jamás descubierto en ese momento.
Lo malo fue que el corte que hizo el estudiante Currey terminó por acabar con la vida de Prometeo.
Así que quién sabe cuantas adversidades no enfrentó este árbol en casi 5 mil años de vida.
Pero no pudo soportar la taladora de Donald Currey.
En el año 2008 se descubrió el árbol más antiguo hasta ahora identificado, una pícea de 9.550 años que data de la era glacial,
El descubrimiento se dio en la provincia de Dalarna, en Suecia.
La parte visible del árbol, de cuatro metros de altura, tiene alrededor de unos 600 años, pero su sistema de raíces ha estado creciendo por unos 9.550 años.
El arbusto, que fue encontrado en una altitud de 910 metros, debe su increíble longevidad a la capacidad de clonarse a si mismo.
Los tallos y el tronco de la pícea tienen una vida útil de alrededor de 600 años; pero tan pronto éstos mueren surgen unos nuevos de las reservas de la raíz
¿Y dejarán al estudiante Donald Currey acercársele a este árbol?
Lo dudamos demasiado.