Este servidor antes de entrar a presentarles mi comentario, considera pertinente decirles que soy una persona de mente muy abierta y respetuosa de las opiniones de las y los demás y no es la excepción a la diferenciación del género, últimamente exigida por algunas damas. Tanto así que en mis comentarios hago tal distinción, como una simple muestra de respeto y consideración hacia aquellas que consideran necesaria esa distinción.
Pero de ahí al exceso y hasta el exabrupto de una señora sindicalista, cuyo nombre no menciono por pena ajena, presentó un recurso ante la Sala Constitucional.contra algún párrafo de nuestro Himno Nacional, aparentemente, por considerarlo discriminatorio por machista. Realmente me parece y creo que es una acción abusiva e inoportuna, la que hizo esta señora de los derechos que la Constitución le ofrece a las y los ciudadanos.
Además si se quiere, la acción presentada fue insuficiente pues, en todo caso, siendo congruente con su pensamiento, debió incluir también en su recurso al Himno Patriótico al 15 de setiembre, específicamente donde dice. “Los hijos del pueblo…”, así como, cualquier otro himno y hasta canción que no haga la debida mención de ambos géneros.
La señora aludida debería pensar que no es la letra, sino su espíritu la que debe ser objeto de análisis y además tomar en cuenta que esa composición fue realizada por don José María Zeledón Brenes en 1903, en esos tiempos, nadie se ocupaba de esas trivialidades y luchas que son más porsemántica que por la defensa de derechos reales.
Por otro lado, es evidente que esa señora no tiene ni la menor idea de la gran saturación de trabajo que tiene la señora magistrada y los señores magistrados que conforman la Sala IV pues si la tuviera, honestamente no creo que se le hubiera siquiera ocurrido presentarles semejante ocurrencia, la cual además lejos de dignificar a las mujeres, casi que más bien, les baja el piso, al exponerlas a la burla porque una mujer hizo una reclamación que, seguramente, la mayoría de las mujeres no comparte.
Por favor, señora y todas y todos los demás costarricenses, hoy la Patria tiene muy graves asuntos que enfrentar y resolver, como son las irreparables pérdidas en vidas humanas ylos destrozos en viviendas e infraestructura pública, producto de las inclemencias del tiempo. La guerra no declarada que, a diario, se libra en nuestras ciudades, producto de una violencia que casi parece ser incontrolable. Así como, el cíclico problema con los políticos de turno de Nicaragua, que buscan crear conflicto cuando tienen algún interés político para perpetuarse en el poder, aun a costa de saber que han mantenido al pueblo hermano de Nicaragua sumido en la pobreza y la desesperanza.Para que alguien salga con un domingo siete como el que motiva este comentario.
Por eso digo: Está bueno el culantro pero no tanto.
Este servidor antes de entrar a presentarles mi comentario, considera pertinente decirles que soy una persona de mente muy abierta y respetuosa de las opiniones de las y los demás y no es la excepción a la diferenciación del género, últimamente exigida por algunas damas.
Tanto así que en mis comentarios hago tal distinción, como una simple muestra de respeto y consideración hacia aquellas que consideran necesaria esa distinción.
Pero de ahí al exceso y hasta el exabrupto de una señora sindicalista, cuyo nombre no menciono por pena ajena, presentó un recurso ante la Sala Constitucional.contra algún párrafo de nuestro Himno Nacional, aparentemente, por considerarlo discriminatorio por machista.
Realmente me parece y creo que es una acción abusiva e inoportuna, la que hizo esta señora de los derechos que la Constitución le ofrece a las y los ciudadanos.
Además si se quiere, la acción presentada fue insuficiente pues, en todo caso, siendo congruente con su pensamiento, debió incluir también en su recurso al Himno Patriótico al 15 de setiembre, específicamente donde dice. “Los hijos del pueblo…”, así como, cualquier otro himno y hasta canción que no haga la debida mención de ambos géneros.
La señora aludida debería pensar que no es la letra, sino su espíritu la que debe ser objeto de análisis y además tomar en cuenta que esa composición fue realizada por don José María Zeledón Brenes en 1903, en esos tiempos, nadie se ocupaba de esas trivialidades y luchas que son más porsemántica que por la defensa de derechos reales.
Por otro lado, es evidente que esa señora no tiene ni la menor idea de la gran saturación de trabajo que tiene la señora magistrada y los señores magistrados que conforman la Sala IV pues si la tuviera, honestamente no creo que se le hubiera siquiera ocurrido presentarles semejante ocurrencia, la cual además lejos de dignificar a las mujeres, casi que más bien, les baja el piso, al exponerlas a la burla porque una mujer hizo una reclamación que, seguramente, la mayoría de las mujeres no comparte.
Por favor, señora y todas y todos los demás costarricenses, hoy la Patria tiene muy graves asuntos que enfrentar y resolver, como son las irreparables pérdidas en vidas humanas ylos destrozos en viviendas e infraestructura pública, producto de las inclemencias del tiempo. La guerra no declarada que, a diario, se libra en nuestras ciudades, producto de una violencia que casi parece ser incontrolable. Así como, el cíclico problema con los políticos de turno de Nicaragua, que buscan crear conflicto cuando tienen algún interés político para perpetuarse en el poder, aun a costa de saber que han mantenido al pueblo hermano de Nicaragua sumido en la pobreza y la desesperanza.Para que alguien salga con un domingo siete como el que motiva este comentario.
Por eso digo: Está bueno el culantro pero no tanto.