La religión, el sistema educativo y las distracciones que el mundo ofrece nos alienan ya lo suficiente de nuestras raíces naturales como para que los mayores medios de comunicación no jueguen un papel educativo en la sociedad... y educación no es equivalente a informarse de acontecimientos, sino a Conocimiento. Ver como Venus hierve por el efecto invernadero y por otro lado, a Marte convertido en un desierto congelado y estéril por perder su campo magnético y atmosfera, nos ayuda a entender lo importante y delicado que es el planeta que habitamos. Su conservación es más importante que las modas, tendencias, farándulas, juguetes tecnológicos, patriotismo, política, religiones, economía, etc. e infinitas actividades que no existirán si seguimos ignorando nuestro ligamen con la naturaleza.
No es de extrañar que Costa Rica no sea un país que vea hacia las estrellas y se haga preguntas y más bien agache la cabeza y alabe sin cuestionar, desde niños nos dicen que un libro escrito hace miles de años tiene las respuestas definitivas a todo y nos enseñan a temerle a las matemáticas, base de ingenierías y ciencias exactas que nos permiten viajar por el mundo, prevenir y curar enfermedades, comunicarnos con miles de personas, tener los últimos celulares, comer alimentos de manera segura, etc.
Al final del día, recopilamos titulares: asaltos, políticos egocentristas, puentes en pedazos, Pastores estorbando al sistema educativo, fotos del vestido de carne cruda de Lady Gaga, etc. Y en la Televisión, novelas sin cesar y en la noche concursos en licras, historias donde la palabra dios y patriotismo son requisitos para ser buena persona y chismes de una farándula inexistente presentados por “minifaldas” que creen que el sexto planeta del Sistema Solar es Kriptón. ¿El resultado?, Likes en Facebook: Combate 414.248 versus Franklin Chang 35.144.
Todos nacemos como pequeños científicos, queremos descubrir, conocer y entender el motivo de las cosas, somos curiosos, creativos y hacemos experimentos sin que nadie nos diga. Tratemos de no ser indiferentes o apoyar causas que matan esos instintos naturales y por el contrario promovamos la Ciencia que es la herramienta que nos tiene en este lugar y la única que va permitir a la raza humana no destruirse a sí misma, al resto de los 10 millones de especies y al único hábitat que tenemos por el momento.
Tratemos de sacar a la gente de ese letargo mental que solo da para gastar la vida en superficialidades, cambiemos el sueño de tener el ultimo celular por, algún día, llegar a conocer otros planetas, seamos más ambiciosos, redefinamos nuestros héroes para admirar a los más inteligentes no a los más musculosos. Nuestros "juguetes" nos distraen momentáneamente pero nunca nos devolverán el hambre por el conocimiento, que a pesar de todo es el que nos ha hecho llegar más lejos como especie.
Carlos López Chinchilla
