Hace unas semanas, fuimos enterados por algunos medios de comunicación sobre la intención del ICE de aumentar de forma exagerada el costo del servicio de mensajería por medio de los celulares. No es mi intención referirme aquí a si el aumento se justifica o no, sino que quiero concentrarme en la forma inapropiada en que esta empresa estatal y el mismo Gobierno han manejado este tema.
Este servidor vio y escuchó las declaraciones que un funcionario del ICE le dio a Telenoticias y entre otras cosas dijo que, al amparo de la nueva legislación sobre telecomunicaciones, el ICE podía hacer aumentos sin tener que consultar a la Aresep. Con ese decir, más que defender el alza, lo que hizo fue poner en evidencia cual es la nueva y supuesta posición del ICE respecto a la Aresep. Tanto que el periodista al cerrar la nota, dijo algo como pareciera que era cierto lo dicho por los opositores al TLC de que con la apertura de las telecomunicaciones, estos servicios se encarecerían.
En los días siguientes, salieron a la prensa distintos funcionarios del ICE refiriéndose al tema del aumento y hasta justificando la decisión tomada de aumentar el costo de los servicios de mensajería celular sin someterlo a consideración de la Aresep. También el Poder Ejecutivo que en inicio tuvo intervenciones casi que tímidas sobre el asunto, al final, tuvo que intervenir directamente; no sin un alto costo de su imagen ante la opinión pública. Esto porque permitió que se diera un gran e innecesario debate nacional sobre las alzas pretendidas por el ICE, sin la anuencia de la Aresep, creando así un clima para que se dieran todo tipo de versiones sobre sus causas.
Algunos días después, en un programa de opinión del señor Dionisio Cabal en Radio Columbia, el cantautor hizo todo un discurso no solo atacando el desproporcionado aumento, sino que además dio a entender que este obedecía a toda una estrategia orquestada para ir preparando el terreno para que cuando entraran empresas privadas a ofrecer servicios de telecomunicaciones, lo pudieran hacer con precios más altos.
En el ICE actuaron exactamente igual, como actuaría una empresa privada, lo cual es inaceptable pues aunque al ICE se le hayan dado mayores libertades de acción para poder competir, esta institución no debe olvidar que es un ente estatal estratégico y que un última instancia, su superior jerárquico es el Presidente de la República.
Si bien en el pasado, la intervención del poder político fue nefasto para el buen desempeño de las instituciones públicas, no por eso se debe satanizar que las empresas estatales le informen, anticipada y exhaustivamente, al Presidente de la República sobre decisiones transcendentales que están considerando implementar y así evitar que se entere por terceros, como según parece sucedió en esta ocasión. Además en la nueva economía las empresas estatales deben tener el rol estratégico de ser verdaderos estabilizadores del mercado, a través de una operación eficiente y eficaz de estos entes públicos, así se evitaran eventuales abusos por parte de alguno de los actores privados.
Ignoro si el señor Cabal tiene elementos sólidos que sustenten su decir de que existe una intención orquestada para favorecer a las empresas privadas de telecomunicaciones o si más bien esta afirmación obedece a una manifestación producto de su posición anti TLC pero lo cierto, es que mucha gente ha hecho suya esa misma explicación y esto le causa un gravísimo daño a la credibilidad en la institucionalidad y a la debida transparencia que siempre el actuar del Gobierno y las instituciones autónomas, semiautónomas y empresas estatales deben observar.