Además, en la casa con gritos y golpes, y hasta en los estadios: con agresiones hacia árbitros, jugadores y entre aficionados.
Con todos estos ejemplos es fácil concluir que algo no marcha bien en un mundo que se jacta de ser civilizado.
Celina García, Directora Ejecutiva del Centro de Estudios para la paz.
INSERCIÓN: lo que ha pasado en la sociedad costarricense es que nos parece que la violencia es algo natural que lo aceptamos, en otras palabras, antes uno veía une persona muerta en media calle pues eso era una noticai, ahora eso es tan lugar común y ese es el peligra tan grande en el que estamos cayendo que nos perece que la violencia es algo natural en nuestra vida.
Según Celina García ante la exposición a hechos y situaciones violentas el ser humano empieza a perder su capacidad de asombro, de compadecerse ante lo que sufren los demás, es decir, que se empieza a desensibilizar.
Esto lo notamos todos los días, cuando, en diferentes situaciones, dejamos de reaccionar.
Recordemos un caso que aquí comentamos, el de un joven que intentaron asaltar en un bus, mientras otros pasajeros decidieron mirar para otro lado, en vez de ir en ayuda de la víctima.
Para Celina García, el ser humano ha buscado en la inacción una manera de defenderse de acciones donde existe violencia de por medio, es casi como si el instinto de sobrevivencia nos dijera: ahí no se meta.
Pero, a veces el instinto se equivoca, ya que si seguimos siendo omisos ante lo que sucede, nos ponemos en riesgo a nosotros mismos.
Seguimos con el caso del asalto en el bus, si no reaccionamos, seguirán los asaltos y un día la víctima podríamos ser cualquiera de nosotros.
Mañana continuaremos con este tema