Investigadores de la Universidad de Costa Rica y Nacional descubrieron en las piedras del río un tipo de mineral denominado aluminosilicato, el mismo está compuesto de aluminio, silicio y oxígeno, y al estar suspendido en el agua, es el responsable de reflejar la luz del Sol de tal manera que el caudal se vea celeste.
Esta sustancia está presente en las aguas del río Buena Vista, afluente del Río Celeste, pero en dicho río no se presenta la coloración particular del segundo.
La respuesta está en el tamaño de las partículas. En el río Buena Vista las partículas tienen un tamaño de 184 nanómetros. En el propio río Celeste son mucho más grandes, de 566 nanómetros. La mayor cantidad de aluminosilicato hace que el rio celeste se vea así.
Lo último que restaba por averiguar, era por qué las partículas aumentan el tamaño que tenían en el río Buena Vista al mezclarse con el Quebrada Agria y formar el río Celeste.
Los investigadores descubrieron que las aguas del afluente Quebrada Agria son altamente ácidas, es decir, contienen iones de hidronio.
Cuando ocurre esta mezcla se da un fenómeno de aglomeración y de aumento del tamaño de las partículas. Una feliz casualidad de la naturaleza.
Ahora a los turistas nacionales y extranjeros que visitan el lugar se les podrá dar una explicación veraz de los que ocurre en río Celeste.
Para ello el grupo de investigación desarrollará un proyecto de acción social de la UNA y la UCR que capacitará a los guías turísticos de la Zona.
Colaboración del periodista y escritor Camilo Rodríguez Chaverri.
Hoy seguimos con el tema sobre el por qué del color de las aguas de Río Celeste.
Este color se trata de un fenómeno óptico.