Y de una vez, conozcamos a la pareja ganadora de un fin de semana para ella y 16 de sus mejores amigos familiares en el maravilloso Hotel Leyenda, ubicado en Carrillo, Guanacaste.
María Francisca Alpízar Rodríguez y Greivin Montero Alfaro, de San Juan de San Ramón de Alajuela.
Doña María Francisca escribió.
Nuestra historia de amor comienza hace 38 años cuando mi esposo y yo teníamos 12 años de edad, en el barrio donde yo vivía en San Juan de San Ramón. Allí en el corredor de mi casa, me gustaba ver a las personas que pasaban al igual que los pocos carros. Todos los domingos miraba, que de los Ángeles, un pueblo que queda más al norte, venía un Land Rover de uno que había antes larguísimos, y que lo manejaba un chiquillo más o menos de mi edad. El carro venía cargado un montón de chiquillos que iban a jugar fútbol a otros barrios. Él era un machillo de ojos verdes y siempre se vestía con un pantalón amarillo y socado, y una camisa blanca A mí me llamó la atención el machillo, y de tanto verlo me comenzó a gustar. Y así, entre saludos y miradas, a los 16 años, un par de chiquillos de los de antes nos hicimos novios. Él mi primer novio, yo su primera novia. Yo quería que él me abrazara y me besara; él quería abrazarme y besarme, pero ninguno de los dos se animaba, solo de vez en cuando un besillo. Así pasaron 8 meses. Un día le conté a mi hermana de 22 años lo que pasaba, y ella me dijo que era por ser tan jóvenes, que mejor nos alejáramos un tiempo; que si era nuestro destino estar juntos eso llegaría. Hablé con él y así lo hicimos; a pesar de amarnos terminamos nuestro noviazgo. Para un 2 de agosto, día de la Virgen de Los Ángeles, una amiga me invitó a que fuéramos a un baile que había en Los Ángeles. Cuando entramos al salón lo primero que ví fue a él solito y hecho un papasote. De una vez me sacó a bailar y bailamos toda la noche con la manita en nuestros corazones, los cuales no se quedaban quietos. En una de esas piezas románticas, YO me animé y le di un beso en la boca. Él estaba deseando y me correspondió. Tenemos 26 años de vivir juntos pero hace 38 que nos amamos, y a pesar de haber tenido momentos difíciles en nuestras vidas, casa día que pasa nos amamos más; él me tiene a mí, yo lo tengo a él, y planeamos seguir así por el resto de nuestras vidas. Termino nuestra historia dándole la razón a aquella niña de 12 años la cual sabía, a pesar de su corta edad, que aquel machillo de pantalones amarillos algún día sería su esposo.
Muchas felicidades a doña María Francisca y a don Greivin, por celebrar su amor compartiéndolo con nosotros.
A ambas parejas, por favor llámennos al 22 56 23 38. 22 56 23 38
Y a todas las parejas enamoradas de Costa Rica de Costa Rica, muchas felicidades por que de una u otra manera su amor también es de Leyenda
Y de una vez, conozcamos a la pareja ganadora de un fin de semana para ella y 16 de sus mejores amigos familiares en el maravilloso Hotel Leyenda, ubicado en Carrillo, Guanacaste.
María Francisca Alpízar Rodríguez y Greivin Montero Alfaro, de San Juan de San Ramón de Alajuela.
Doña María Francisca escribió.
Nuestra historia de amor comienza hace 38 años cuando mi esposo y yo teníamos 12 años de edad, en el barrio donde yo vivía en San Juan de San Ramón. Allí en el corredor de mi casa, me gustaba ver a las personas que pasaban al igual que los pocos carros. Todos los domingos miraba, que de los Ángeles, un pueblo que queda más al norte, venía un Land Rover de uno que había antes larguísimos, y que lo manejaba un chiquillo más o menos de mi edad. El carro venía cargado un montón de chiquillos que iban a jugar fútbol a otros barrios. Él era un machillo de ojos verdes y siempre se vestía con un pantalón amarillo y socado, y una camisa blanca A mí me llamó la atención el machillo, y de tanto verlo me comenzó a gustar. Y así, entre saludos y miradas, a los 16 años, un par de chiquillos de los de antes nos hicimos novios. Él mi primer novio, yo su primera novia. Yo quería que él me abrazara y me besara; él quería abrazarme y besarme, pero ninguno de los dos se animaba, solo de vez en cuando un besillo. Así pasaron 8 meses. Un día le conté a mi hermana de 22 años lo que pasaba, y ella me dijo que era por ser tan jóvenes, que mejor nos alejáramos un tiempo; que si era nuestro destino estar juntos eso llegaría. Hablé con él y así lo hicimos; a pesar de amarnos terminamos nuestro noviazgo. Para un 2 de agosto, día de la Virgen de Los Ángeles, una amiga me invitó a que fuéramos a un baile que había en Los Ángeles. Cuando entramos al salón lo primero que ví fue a él solito y hecho un papasote. De una vez me sacó a bailar y bailamos toda la noche con la manita en nuestros corazones, los cuales no se quedaban quietos. En una de esas piezas románticas, YO me animé y le di un beso en la boca. Él estaba deseando y me correspondió. Tenemos 26 años de vivir juntos pero hace 38 que nos amamos, y a pesar de haber tenido momentos difíciles en nuestras vidas, casa día que pasa nos amamos más; él me tiene a mí, yo lo tengo a él, y planeamos seguir así por el resto de nuestras vidas. Termino nuestra historia dándole la razón a aquella niña de 12 años la cual sabía, a pesar de su corta edad, que aquel machillo de pantalones amarillos algún día sería su esposo.
Muchas felicidades a doña María Francisca y a don Greivin, por celebrar su amor compartiéndolo con nosotros.
A ambas parejas, por favor llámennos al 22 56 23 38. 22 56 23 38
Y a todas las parejas enamoradas de Costa Rica de Costa Rica, muchas felicidades por que de una u otra manera su amor también es de Leyenda