ORIETTA: Dónde se dicen más malas palabras?
Mmm en el estadio.
O en la calle,
Donde sea que se digan palabrotas es mal visto y a veces hasta sancionado.
Pero en el Estado de Victoria, en Australia decir malas palabras puede salir bien caro.
Decir palabrotas o frases ofensivas en público será castigado con una multa de 257 dólares
Victoria es el segundo Estado más poblado de Australia.
La medida se aplicará no sólo en la calle, sino también en lugares como bares, estadios, carreteras y teatros.
En realidad, allí decir palabrotas ya era sancionable.
En el estado de Victoria, decir groserías -incluso en privado- ya era considerado una falta desde hace 45 años.
De modo que no se trata de una ley nueva, sino de una reforma.
"La ley busca reprimir el tipo de comportamiento ofensivo en público que hace la vida desagradable para todos los demás"
Dijo Robert Clark, fiscal general de Victoria.
Los nuevos cambios permitirán que la policía multe en el acto al responsable, del mismo modo que se despachan las multas de velocidad o por estacionamiento no permitido.
El fiscal general de Victoria, Robert Clark, explicó a la radio australiana ABC que esta medida es un alivio para la policía ya que hasta ahora los autores de este comportamiento necesitaban ser llevados ante un juez, con el consiguiente gasto de tiempo y dinero.
Quienes se oponen a la reforma de ley, sin embargo, aseguran que carece de sentido y que afectará desproporcionadamente a las minorías y sobre todo a los jóvenes.
La medida, aunque no tan popular parece que pondrá una mordaza a quienes arremeten contra los árbitros en los estadios, los malos choferes y contra los infortunios del destino.
ORIETTA: Dónde se dicen más malas palabras?
Mmm en el estadio.
O en la calle,
Donde sea que se digan palabrotas es mal visto y a veces hasta sancionado.
Pero en el Estado de Victoria, en Australia decir malas palabras puede salir bien caro.
Decir palabrotas o frases ofensivas en público será castigado con una multa de 257 dólares
Victoria es el segundo Estado más poblado de Australia.
La medida se aplicará no sólo en la calle, sino también en lugares como bares, estadios, carreteras y teatros.
En realidad, allí decir palabrotas ya era sancionable.
En el estado de Victoria, decir groserías -incluso en privado- ya era considerado una falta desde hace 45 años.
De modo que no se trata de una ley nueva, sino de una reforma.
"La ley busca reprimir el tipo de comportamiento ofensivo en público que hace la vida desagradable para todos los demás"
Dijo Robert Clark, fiscal general de Victoria.
Los nuevos cambios permitirán que la policía multe en el acto al responsable, del mismo modo que se despachan las multas de velocidad o por estacionamiento no permitido.
El fiscal general de Victoria, Robert Clark, explicó a la radio australiana ABC que esta medida es un alivio para la policía ya que hasta ahora los autores de este comportamiento necesitaban ser llevados ante un juez, con el consiguiente gasto de tiempo y dinero.
Quienes se oponen a la reforma de ley, sin embargo, aseguran que carece de sentido y que afectará desproporcionadamente a las minorías y sobre todo a los jóvenes.
La medida, aunque no tan popular parece que pondrá una mordaza a quienes arremeten contra los árbitros en los estadios, los malos choferes y contra los infortunios del destino.