Las personas facilitadoras judiciales realizan estas funciones voluntariamente, son elegidas por sus propios vecinos en asambleas comunitarias y, además, cuentan con la supervisión y capacitación constante de juezas y jueces locales.
Sobre los beneficios de contar con una persona facilitadora en la comunidad, nos comenta la politóloga y funcionaria judicial, Daniella Guevara Walker, quien trabaja en el seguimiento a este Servicio.
En Costa Rica tenemos 216 mujeres facilitadoras judiciales y 195 hombres facilitadores que viven en barrios de la zona norte del país, región atlántica, pacífico central, norte y sur.
El trabajo que realizan estas personas es muy valioso y de gran impacto, así lo indican informes del Poder Judicial que señalan que en 2016 este servicio benefició a más de 20 mil personas de áreas rurales.
En 2016, los facilitadores ayudaron a más de 7 mil personas de sus barrios con orientación sobre servicios. Además, organizaron 1.341 charlas o talleres con una asistencia superior a las 10 mil personas, en estas charlas participó personal judicial y de otras instituciones públicas brindando información sobre temas de interés comunitario, como por ejemplo el acoso escolar o la violencia doméstica y las vías para denunciarlo.
Para explicar el significado e impacto de este servicio para el Poder Judicial nos comenta nuevamente la politóloga Daniella Guevara:
Para realizar consultas sobre el Servicio Nacional de Facilitadoras y Facilitadores Judiciales, se puede llamar a Conamaj, oficina del Poder Judicial encargada del seguimiento, al número 2295-3322.