ORIETTA: Había una vez, un hermoso jardín, con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales, todos ellos felices y satisfechos.
ORIETTA: Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol profundamente triste. El pobre tenía un problema: "No sabía quién era."
ORIETTA: "Lo que te falta es concentración", le decía el manzano, "si realmente lo intentas, podrás tener sabrosas manzanas. ¡¡¡Mirá que fácil que es!!!
GUSTAVO DELGADO: - No lo escuchés,. Es más sencillo tener rosas, como yo y "¿Ves que bellas son?"
ORIETTA: Y el árbol desesperado, intentaba todo lo que le sugerían, y como no lograba ser como los demás, se sentía cada vez más frustrado. Un día llego hasta el jardín el búho, la más sabia de las aves, y al ver la desesperación del árbol, exclamo:
GUSTAVO ROJAS: - No te preocupes, tu problema no es tan grave, es el mismo de muchísimos seres sobre la tierra. Yo te daré la solución. No dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas. Se tú mismo, conócete, y para lograrlo, escucha tu voz interior. Y dicho esto, el búho desapareció.
RONNY: - ¿Mi voz interior...? ¿Ser yo mismo...? ¿Conocerme...?,
EFECTO REVER DE PPP
RONNY: - jamás darás manzanas porque no eres un manzano, ni florecerás cada primavera porque no eres un rosal. Eres un roble, y tu destino es crecer grande y majestuoso. Dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, belleza al paisaje... Tienes una misión "Cúmplela". Y el árbol se sintió fuerte y seguro de sí mismo y se dispuso a ser todo aquello para lo cual estaba destinado.
ORIETTA: Así, pronto llenó su espacio y fue admirado y respetado por todos. Y solo entonces el jardín fue completamente feliz.
Ronny: Y usted... ¿deje crecer el roble que hay en su interior? En la vida, todos tenemos un propósito que cumplir, un espacio que llenar.
ORIETTA: No permita que nada ni nadie te impida conocer y compartir la maravillosa esencia de tu ser.
ORIETTA: Había una vez, un hermoso jardín, con manzanos, naranjos, perales y bellísimos rosales, todos ellos felices y satisfechos.
ORIETTA: Todo era alegría en el jardín, excepto por un árbol profundamente triste. El pobre tenía un problema: "No sabía quién era."
ORIETTA: "Lo que te falta es concentración", le decía el manzano, "si realmente lo intentas, podrás tener sabrosas manzanas. ¡¡¡Mirá que fácil que es!!!
GUSTAVO DELGADO: - No lo escuchés,. Es más sencillo tener rosas, como yo y "¿Ves que bellas son?"
ORIETTA: Y el árbol desesperado, intentaba todo lo que le sugerían, y como no lograba ser como los demás, se sentía cada vez más frustrado. Un día llego hasta el jardín el búho, la más sabia de las aves, y al ver la desesperación del árbol, exclamo:
GUSTAVO ROJAS: - No te preocupes, tu problema no es tan grave, es el mismo de muchísimos seres sobre la tierra. Yo te daré la solución. No dediques tu vida a ser como los demás quieran que seas. Se tú mismo, conócete, y para lograrlo, escucha tu voz interior. Y dicho esto, el búho desapareció.
RONNY: - ¿Mi voz interior...? ¿Ser yo mismo...? ¿Conocerme...?,
RONNY: - jamás darás manzanas porque no eres un manzano, ni florecerás cada primavera porque no eres un rosal. Eres un roble, y tu destino es crecer grande y majestuoso. Dar cobijo a las aves, sombra a los viajeros, belleza al paisaje... Tienes una misión "Cúmplela". Y el árbol se sintió fuerte y seguro de sí mismo y se dispuso a ser todo aquello para lo cual estaba destinado.
ORIETTA: Así, pronto llenó su espacio y fue admirado y respetado por todos. Y solo entonces el jardín fue completamente feliz.
Ronny: Y usted... ¿deje crecer el roble que hay en su interior? En la vida, todos tenemos un propósito que cumplir, un espacio que llenar.
ORIETTA: No permita que nada ni nadie te impida conocer y compartir la maravillosa esencia de tu ser.