Martes, 07 Mayo 2013 05:14

DECISIÓN 2014: Voto 4

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Hoy finalizamos nuestras reflexiones sobre el voto y su valor como derecho y deber ciudadano.
Ayer comentábamos que en algunos países como El Salvador y Panamá, el voto es obligatorio, pero en nuestro país es una opción de cada ciudadano ejercer este derecho pero apuntábamos sobre la importancia de una amplia participación de la ciudadanía en los procesos electorales, para mejorar y mantener la democracia.

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Uno de las mayores preocupaciones para nuestro sistema democrático es que cada día menos personas se sientan atraídas de acudir a las urnas, permitiendo que sean los demás, quienes elijan a nuestros gobernantes.
Hugo Picado Director del Instituto de Formación y Estudios en Democracia, IFED, considera que es una mala señal que algunos costarricenses estén perdiendo la perspectiva de que el voto es un derecho y deber ciudadano.
Inserción: “Pero además de los derechos las ciudadanas y los ciudadanos también tienen deberes y uno de los deberes fundamentales en la participación ciudadana es el deber al sufragio, el deber a votar, así que es un mal síntoma, síntoma cuando menos preocupante, algunos dicen que no, pero nosotros desde una perspectiva del Tribunal, sí vemos con preocupación cuando se incrementa las tasas de abstencionismo y es algo que hay que revisar, porque muchas veces a pesar que cada vez es más fácil votar, que cada vez es más cerca, que el costo en cuanto a movilización es menor la ciudadanía tiende a participar menos”.
Tal parece que un sector de la población está tan desencantada con la política que ya no se siente atraída a visitar las urnas.
Un hecho muy llamativo es el de las elecciones de Alcaldes, las cuales se hacen en forma directa, por medio del voto popular, desde el año 2002, luego de tres procesos electores realizados el promedio de votación es apenas de un treinta por ciento del padrón electoral.
Así es, solo 3 de cada 10 personas han participado en estas elecciones.
En el caso de las elecciones presidenciales y para escoger diputados, el promedio de abstencionismo ha rondado el 30 por ciento y algunos creen que para el proceso de febrero del 2014 este porcentaje podría aumentar.
Precisamente, uno de los propósitos de esta sección es hacerle comprender a usted, que ir a votar es el primer paso que da un ciudadano para apoyar a su país y al sistema democrático, haciendo valer su derecho de decidir, quienes serán nuestros futuros gobernantes.
Sobre este tema ampliaremos en futuras semanas, en DECISION 2014.