Quedamos con el nacimiento, en 1983, del partido Unidad Social Cristiana, el cual, se da gracias a la unión de tres partidos políticos, el Republicano Calderonista, Unión Popular y Demócrata Cristiano.
Daniel Calvo politólogo,
Inserción: “Las coaliciones propiamente fueron comunes en el pasado como bloques principalmente para aglutinar el no Liberacionismo, posteriormente al conformarse el PUSC y conformarse un sistema bipartidista, dejaron de tener razón de ser”.
Llegamos entonces al punto del cierre de la cápsula del lunes de la semana: el bipartidismo, es decir el PUSC y el PLN empezaron a dominar la escena política nacional.
A partir de los 90, esta etapa está marcada por la alternancia en el poder, misma situación que se daba en la Asamblea Legislativa, donde las fracciones de Liberación y la Unidad eran las que dominaban el Congreso, con la participación de pocas representaciones de otros partidos políticos.
De esta manera pasaron más de 20 años, hasta que los escándalos de corrupción que vinculaban a dos expresidentes de la República provenientes del PUSC, el desgaste del PLN y el surgimiento del Partido Acción Ciudadana terminaron por quebrar este modelo, para introducirnos en el actual, el cual ha sido tildado como “los tiempos de la ingoberbilidad”