Hemos percibido que muchas personas, al momento de hablar o escribir, dan muchas vueltas para plasmar una idea, y cuando lo hacen prácticamente no dicen nada, por eso, en esta ocasión, le preguntamos a don Carlos el porqué de esta actitud.
Don Carlos nos manifestó que precisamente uno de los vicios más comunes en la comunicaciónes que muchas personas no transmiten sus ideas de manera concreta por la razón de que, desde pequeños, culturalmente, se nos enseña a dar rodeos para todo ya que lo directo se ve como negativo y grosero.
Esto lo que hace es que se utilice información innecesaria, de relleno, superficial, lo cual afecta la comunicación pues quien lee o escucha lo transmitido lo percibe de manera confusa o incomprensible.
Según Carlos Díaz esta manera de comunicarse, está registrada, desde 1992, en la Real Academia de la Lengua Española con el verbo“cantinflear”, es decir cuando las personas poseen una forma de comunicarse sin decir nada, en referencia a la particular manera de hablar del cómico mexicano Mario Moreno, Cantinflas.
Y lo más preocupante es que este fenómeno lingüístico cantinflesco se puede observar en personas de todos los estratos sociales, de cualquier profesión y edad.
Por eso, de acuerdo con las recomendaciones de nuestro colaborador , es importante que al momento de comunicarnos sigamos algunos consejos como, por ejemplo, pensar muy bien lo que se va a transmitir. Estructurar lo que se va a comunicar. Reducir lo comunicado mediante palabras más breves, directas y sencillas. No usar construcciones rimbombantes. Eliminar toda aquella información que sea superflua. Y pensar, a conciencia, en los respectivos receptores.
Definitivamente si empezamos a mejorar nuestra forma de comunicarnos, entonces podríamos asegurarnos una interacción más eficaz con los demás donde no exista duda sobre el significado que deseamos transmitir.
Con esto concluimos una nueva entrega en defensa de nuestro idioma, gracias a la colaboración del escritor y filólogo Carlos Díaz Chavarría.