Aunque los investigadores han centrado su estudio en Estados Unidos, los resultados son extrapolables a otras zonas del mundo.
“El calentamiento favorecerá que las tormentas sean más explosivas”, señaló el climatólogo David Romps, de la Universidad de California. “El fenómeno está relacionado con el vapor de agua, que funciona como combustible en estos procesos. Precisamente, el cambio climático propiciará que se produzca en mayor cantidad”.
Un mayor número de rayos se traducirá en un mayor número de víctimas –cada año, en nuestro país decenas de personas son alcanzadas por una de estas descargas; y en más incendios.
Fuente. Muyinteresante.es