Permítanme ofrecerles una ensalada transgénica
¿¡qué!
No se asusten. Esto no es nada nuevo, durante miles de años hemos modificado los vegetales que utilizamos como alimento
Por ejemplo, las coles de Bruselas, la coliflor, el brócoli,
...las manzanas, el maíz, las papas y el trigo, son variedades artificiales de las plantas, aunque no lo parezcan.
Los antepasados salvajes de muchas de estas plantas, cuando existen, son tan diferentes de las variedades actuales, que si usted no es un experto en botánica, no las reconoce
Pero actualmente la ingeniería genética permite agregar o quitar cromosomas del núcleo de la célula, con lo que se pueden lograr especies vegetales o animales nunca antes vistos.
Como un pollo de cuatro patas, o una vaca que produzca redes de araña.
Pero lo usual es que las especies se modifiquen para que sean mas durables, resistan a las malas condiciones y plagas de insectos.
Sin embargo, en el plano internacional se debate si los alimentos resultados de la ingeniería genética deberían llevar una etiqueta de advertencia.
La Unión Europea está preparando una propuesta de reglamento, el cual especifica la obligatoriedad de que los productos transgénicos incluyan una etiqueta advirtiendo al consumidor.
Los Estados Unidos se niegan a aplicar esta medida, basando su decisión en que no se ha comprobado que los alimentos transgénicos sean perjudiciales para el consumidor y para el medio ambiente.
El asunto no es muy sencillo, ya que también existen productos transgénicos que son utilizados como ingredientes para otros productos.
Por ejemplo la industria del pan y la repostería, utilizan encimas modificadas para poder preparar dichos productos,
¿Cómo etiquetar a todos estos productos?
En Costa Rica, la Cámara Costarricense de Industria Alimentaria está de acuerdo con el etiquetado obligatorio, pero con algunas condiciones.
Según Mónica Elizondo, tecnóloga de productos, en el país se exigirá que en las listas de ingredientes de un producto se especifique si alguno haya sido modificado genéticamente.
Así, el consumidor podrá tomar la decisión de comprarlo o no.
Pero lo cierto es que la ciencia ya ha sobrepasado a la imaginación
¡Mirá! eso que se mueve en la ensalada, ¿qué es?
APURATE, léeme la etiqueta