El derecho a la privacidad es uno de los fundamentales de la persona.
Y como tal se esta perdiendo
Cada día nos fotografían, nos siguen, nos escanean y clasifican, nos catalogan y almacenan en bases de datos, analizan nuestras conductas para predecir nuestros futuros hábitos de compra, o para saber si somos potenciales peligros para alguien.
Nunca antes el individuo había sido sujeto a tanta invasión de su privacidad.
Muchos atropellos a las libertades se han implementado después del once de septiembre del dos mil uno, y se supone que nuestra libertad perdida es compensada por la seguridad global.
Pero la pregunta es: ¿cuando nos devolverán esas libertades que hoy nos arrebatan en nombre de la seguridad?
Porque la verdad es que nuestras libertades se estaban perdiendo antes de los ataques terroristas contra nueva York.
Por algo, la seguridad tecnológica es el campo de inversión mas lucrativo del mundo,
El sistema Carnívoro del FBI inspecciona todas las comunicaciones a través de Internet
La agencia nacional de seguridad de los estados unidos tiene al sistema satelital Echelon, que controla todas las llamadas telefónicas y los faxes a través del mundo
El sistema TEMPEST permite saber lo que usted hace en su computadora sin entrar a su casa, sintonizando las emisiones de su pantalla.
En Gran Bretaña hay dos millones y medio de cámaras filmando las calles.
Cada ciudadano ingles es filmado por 300 cámaras diariamente
Los sistemas de inteligencia artificial buscan detectar lo que llaman conductas sospechosas,
La empresa Digital Solutions desarrolló Digital Angel, que se implanta bajo la piel y transmite donde se encuentra usted, y todos sus datos médicos, segundo a segundo.
Cada día los políticos están mas inseguros y buscan mas tecnología para controlar a todos los ciudadanos
Las tecnologías son nuevas, pero el afán por controlarnos es viejo como la humanidad misma.
Y lo que es peor, cada día estamos más dispuestos a renunciar a sus libertades sin protestar.
¿qué tipo de sociedad se está construyendo, en donde todos somos vigilados?
Y sobre todo, ¿por qué casi nadie se atreve a hablar?
Reflexiones del ex actor y activista político estadounidense, Chartlon Heston