Comer menos y vivir más
Con esas palabras todos estamos de acuerdo
A pesar de que muy pocos lo practican.
Pero, aparte de las razones estéticas o de moda, hay evidencia científica que dice que las moscas y los ratones menos alimentados, viven más.
Lamentablemente, hubo que quitarles una tercera parte del alimento a las ratas para que su vida se extendiera de manera considerable
La dieta, llamada restricción calórica, es tan severa, que las ratas nunca se acostumbraron a ella, simplemente vivieron constantemente con hambre.
Ahora está en curso un experimento similar con monos, para ver si la idea puede aplicarse a seres humanos.
Aunque el experimento no ha terminado, hasta la fecha los fallecimientos son un diez por ciento más altos entre los monos alimentados normalmente que entre el grupo con hambre.
Y los monos sometidos a restricción calórica se enferman menos, son más delgados y tienen una más baja temperatura corporal.
Según la revista Science, solo hay tres aspectos que se ha podido determinar claramente que ayudan a vivir más.
Uno es la baja temperatura de la piel,
El segundo es un bajo nivel de insulina en la sangre
Y el tercero es un alto nivel de una hormona conocida como DHEAS, o sulfato de dehidro epiandrosterona.
la hormona DHEAS es una hormona benéfica, que ayuda a la mujer a tener un mejor sistema inmunológico y una menor tasa de cáncer.
En todo caso, el propósito de estas investigaciones es entender los cambios químicos que ocurren en el cuerpo con la dieta de reducción calórica
Y eso no se sabrá hasta que termine el estudio de los monos, a los que se mantiene con un 30% menos de alimento.
Pero desde ya, sabemos que lo que la gente busca no es sólo vivir muchos años.
Sino vivirlos de una manera que valga la pena.
De otra manera, los millones de victimas de la hambruna y la sequía en el África sub-sahariana serían la envidia de todo el planeta,