Conocemos el caso de instituciones y empresas que trabajan por disminuir el impacto ambiental de sus operaciones, entre ellas escuelas públicas y privadas, fincas, mipymes, gasolineras y hoteles, entre otros.
Pero sabemos también que existen otras organizaciones que de manera aislada aportan su granito de arena en la conservación de los recursos naturales, ya sea a través del reciclaje, de la reducción del gasto de la electricidad y el agua o sembrando árboles.
Hoy, queremos instar justamente a esas organizaciones para que conviertan sus aportes en todo una cultura, utilizando incluso herramientas como la certificación de Carbono Neutralidad.
De acuerdo a los casos de los que hemos sido testigos, les aseguramos que esta cultura se extenderá a los hogares y a las comunidades. Y así es como todos podemos ir dirigiendo al país hacia la famosa Meta de Carbono Neutralidad para el 2021.

Los beneficios de ser parte de la red de organizaciones certificadas como carbono neutro van incluso más allá del desarrollo sostenible, pues fomenta la unión comunal, forma a ciudadanos con conciencia ambiental y fortalece el arraigo y el orgullo de pertenecer a un país que cuida a la naturaleza.
Instamos a todos los costarricenses a que se unan a la celebración del Mes del Ambiente y a que hagan un esfuerzo por modificar los hábitos diarios para cambiar la realidad del país.
Costa Rica y las futuras generaciones se lo agradecerán.