El viernes 07 de diciembre se llevó a cabo la Sexagésima Primera Graduación del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE).
En esta ocasión, 56 estudiantes obtuvieron el grado de maestría y seis el de doctorado representando 14 países de América Latina y Norteamérica. Las maestrías se otorgaron en los campos de agricultura ecológica, agroforestería tropical, manejo y conservación de bosques y biodiversidad, manejo integrado de cuencas hidrográficas y socioeconomía ambiental.
También en la gala de graduación se otorgó al Doctor Rodrigo Gámez Lobo, el doctorado honoris causa, por sus múltiples contribuciones a la ciencia, la docencia y el desarrollo de los países latinoamericanos.
Este reconocimiento se basó en una trayectoria profesional ejemplar que el Dr. Gámez inició en 1958 como profesor e investigador de la Universidad de Costa Rica (UCR), donde ocupó altos cargos en distintos departamentos de investigaciones y ciencias. Fue el primer director del Programa de Estudios de Posgrado bajo el Convenio entre el CATIE y la UCR , entre 1973 y 1974. Su dedicación lo ha llevado a ser miembro fundador de una diversidad de instituciones donde resalta su labor como Presidente del Instituto Nacional de Biodiversidad (INBio) cargo que ha ocupado desde su fundación. Ya tiene cincuenta años de realizar una gran labor científica y ambiental.
A lo largo de su vida don Rodrigo Gámez ha recolectado una larga lista de premios y reconocimientos y se ha destacado por ser una de las personas más influyentes en el sector ambiental de Costa Rica. Este científico ha incidido significativamente en las políticas sociales del país, no en vano el Ex presidente Abel Pacheco, lo invitó a formar parte del Consejo de Notables que analizó las repercusiones del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
En el acto de gala, don Rodrigo dijo que la clave de un líder está en lograr que otros compartan sus sueños, no en exigir ni mandar.
“Cada día se deben tener nuevas metas y se debe disfrutar y vivir apasionadamente cada nuevo reto profesional. El mundo moderno, nuestros países en particular, necesitan gente dispuesta a arriesgarse, que es la gente que hace la diferencia. Debemos trabajar en equipo para afrontar los cambios globales y revertir aquellos que han venido a dañar los ecosistemas”, puntualizó.
Don Rodrigo es hijo de don Uladislao Gámez, don Lalo Gámez, tres veces ministro de Educación, durante los tres gobiernos de don Pepe Figueres, con quien fundó más de cien colegios de secundaria, y llevó la educación a todos los rincones del país.
Don Rodrigo es uno de los grandes líderes en el campo ambiental y científico que están haciendo una gran diferencia por Costa Rica, y que debemos reconocer y aplaudir, de pie, con sombrero en mano, como pretendo hacerlo en este momento con este gran costarricense.